Decepcionado con la Iglesia el secretario de Justicia

Por Limarys Suárez Torres

lsuarez1@elnuevodia.com

Un día después de recibir la demanda que radicó la Diócesis de Arecibo y su obispo Daniel Fernández Torres para frenar el pedido que hizo Justicia de documentos confidenciales eclesiásticos que detallan casos de abuso sexual de menores perpetrados por sacerdotes ya expulsados, Miranda Rodríguez confesó ayer estar decepcionado con la ruta que tomó la Iglesia Católica.

El designado secretario de Justicia puntualizó que el Estado tiene una responsabilidad indelegable de investigar e identificar a los pederastas, aun cuando algunos vistan sotana, porque al final del día lo que se logra es prevenir que otros niños caigan en las garras de estas personas enfermas.

Y ese es el foco que mantendrá Justicia en la pesquisa que realiza contra sacerdotes pederastas pues nadie, según Miranda Rodríguez, está por encima de la ley.

¿A usted le tiembla el pulso para investigar estos casos de abuso sexual perpetrados por curas?

Me sonrío cuando me dicen que me va a temblar el pulso porque eso está lejos de lo que es la realidad. Es todo lo contrario. Me parece insólito que la Diócesis y la Iglesia Católica estén en una posición distinta de la que está el Departamento de Justicia.

¿Qué es lo que le parece insólito?

Se supone que estemos buscando el mismo remedio para un mal que nos atormenta a todos en Puerto Rico y en otros lugares. Y cuando uno pensaría que íbamos a unir esfuerzos para erradicar ese mal pues entonces nos confrontamos con una institución que asume una postura adversativa. Anticipé que iba a ser lo contrario, que a la Iglesia Católica y a la Diócesis de Arecibo les iba a interesar tanto como a nosotros resolver este problema.

La Iglesia dice que los casos están prescritos y no tiene que informarle a las autoridades civiles.

El argumento de que las personas que fueron víctimas de estos atropellos ya son adultos me da vergüenza ajena. De eso no es de lo que se trata. Aquí hay que mirar cuál fue el trasfondo de estos casos y anticipar entre todos cómo lo resolvemos. Si un caso está o no prescrito no puede ser impedimento para que uno descubra qué pasó y cómo lo evitas de cara al futuro. Tan sencillo como eso. A mí me parecía que esto era un objetivo común y me siento sumamente decepcionado al ver que no es un objetivo común, que en el Departamento de Justicia andamos con el objetivo de atacar este mal tan dañino para estos niños y niñas puertorriqueñas, que violenta la confianza de los padres de...

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