Desempleo real vs. el oficial

Prof. José G. García

Escuela Graduada de Administración Pública

Para muchos es una tasa elevada reflejo de la situación en que se encuentra nuestra economía. A pesar que esta apreciación es correcta la gravedad de nuestro mercado laboral es mucho más compleja y adversa de lo que reflejan las cifras oficiales.

Hemos estado en una recesión durante los últimos cinco años. En este periodo (2006-11) nuestra economía ha perdido más de 184 mil empleos (incluye empleos por cuenta propia), según la Encuesta de Vivienda del Departamento del Trabajo. Esto ha propiciado que la tasa de empleo haya disminuido de 42.6% en el 2006, a 34.8 % en el 2011.

Es decir, menos de una tercera parte de la población apta para trabajar, se encuentra empleada. Además la tasa de empleo es un indicador de los cambios en la demanda por trabajo, por ende los datos reflejan que esta ha venido disminuyendo de forma significativa.

Ante la baja demanda por empleo y por consiguiente poca probabilidad de conseguir trabajo, la teoría del mercado laboral nos indica que los trabajadores tienden a desalentarse y salir de la fuerza laboral (empleados más desempleados). A este tipo de personas se le denomina como trabajadores desalentados. Estas personas se encuentran disponibles para trabajar pero dejan de buscar trabajo porque entienden que no van a conseguirlo. Es probable que esto explique por qué hemos visto, durante los últimos años, una reducción significativa en la oferta de trabajo, la cual es medida a través de la tasa de participación laboral. Este indicador se define como el porciento que representa la fuerza laboral de la población civil no institucional de 16 años o más.

Durante el periodo 2006-11 , la tasa de participación se redujo de 47.9 % a 41.4%, respectivamente. Esto quiere decir, que durante la recesión se retiraron de nuestra fuerza laboral alrededor de 137 mil personas.

Cabe indicar que a pesar que en Puerto Rico hemos tenido tasas de participación de menos de 50% aún en las mejores épocas de nuestro desarrollo económico, los niveles registrados en los últimos años resultan ser los más bajos en los últimos treinta años.

Según estudios realizados por el autor (García, 1989) y otros investigadores (Santiago, 1992), las transferencias federales a las personas ha inducido a estas a no participar en el mercado laboral. También el crecimiento de la economía informal ha sido otro factor que se ha vinculado a la reducción en la participación laboral en la Isla...

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