Una despedida romántica

Por Patricia Vargas CASIANO

pvargas@elnuevodia.com

"Me cansé de 67 años de estar cantando. Quiero ir a los lugares que me han recibido, como en Puerto Rico, y disfrutarlos de otra manera, como turista, comiéndome un buen pescado en Salinas, ir a La Parguera. A esta isla hay que disfrutarla como se merece", dijo ayer el bolerista, quien se moría de ganas por comerse un asopao.

De Puerto Rico se despedirá artísticamente con dos conciertos: mañana en la Plaza de Mayagüez y el sábado con un homenaje a las Madres en el Paseo de las Artes en Caguas.

"El embajador del romanticismo" estará acompañado de su hijo Antonio Marcos, pero aunque el espectáculo está montado con Jorge, su hijo mayor, éste no lo pudo acompañar por compromisos que tiene en México este fin de semana.

Para complacer a su fiel audiencia el intérprete de Escándalo tendría que estar muchas horas cantando, así que preparó una selección en que no pueden faltar temas de Rafael Hernández, Pedro Flores, Bobby Capó y Silvia Rexach.

"Espero no equivocarme, pero quiero darle al público un relato de continuidad de mi carrera a través de los años".

Marco Antonio espera que sus amigos cantantes boricuas lo acompañen en la despedida. Quien lamentablemente no estará es Gilberto Santa Rosa, que lo fue a ver ayer porque viaja hoy a España para presentarse en Tenerife. "El quería estar conmigo y no pudo, pero lo voy a invitar a él y a todos mis amigos de boricuas a que me acompañen en mi último show de despedida en el Palacio de las Artes de México. Todavía no tengo fecha".

Cuando el "Lujo de México" dejé de cantar quiere darle la vuelta al mundo en un barco, pero antes, tomará clases de...

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