Después de la campaña

ISMAEL TORRES

PERIODISTA

Algunas personas entendidas en asuntos financieros y económicos han planteado desde antes de las elecciones generales que el cuadro fiscal y económico que existe en el País no permitirá que se cumplan las promesas económicas que se hicieron, principalmente la de los aumentos salariales a los empleados públicos y los aumentos en las pensiones.

Por el contrario, ya se comienza a ver entre esas mismas personas un consenso de que habrá que subir de un siete a un diez por ciento el IVU y habrá que establecerse una reducción de salarios a todos los empleados públicos de no menos del diez por ciento.

En cuanto a la cantidad de dinero que reciben los pensionados del gobierno es otro cantar, pero las noticias no son muy buenas. Parece que lo primero que se irá serán los dos bonos que reciben al año esos retirados, dada la realidad de que no hay dinero.

Lo del aumento del IVU y la reducción salarial a los empleados públicos sería debido a que los recaudos han ido mermando de manera muy peligrosa al punto de que podría darse la situación de tener que decidir si se paga parte de la nómina pública o se dejan de prestar servicios básicos de salud y educación.

A ese cuadro crítico se le debe sumar el plan de recortes de fondos federales ya legislados en los...

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