El día que el PPD perdió su apellido

ANTONIO QUIÑONES CALDERÓN

ESCRITOR Y PERIODISTA

Si el alcalde no apoyaba a uno de los dos, el boleto le era entregado por el siguiente líder de mayor prominencia del partido que apoyara uno de los dos favorecidos.

Traspasado el portoncillo de la sección que se le había asignado, el delegado tenía que localizar a su alcalde para reiterarle el respaldo a uno u otro de los dos aspirantes aceptables. Entonces, tenía que sentarse en la butaca indicada en el boleto y no moverse de ella ni siquiera a buscar agua o saludar a un correligionario. Mucho menos podía pasar a otra a sección a hablar con algún compañero. Todo estaba agresivamente planificado. Todo marchaba a la perfección en aquella monumental agresión a la democracia.

Ahora, ya sentados en sus butacas (prohibido aplaudir hasta que desde la mesa presidencial se les diera la señal), a esperar que comenzara la función. La veda del aplauso estaba de más: ninguno de los aspirantes podría dirigirse a los delegados enjaulados, así que no había espacio para aplaudir. Sólo hablaría el gran caudillo. El que advertiría que "en el subsiguiente gobierno popular yo podré cooperar con algunos de los candidatos con toda la militancia y entusiasmo de que soy capaz; con el otro candidato sólo podría colaborar con mi retiro absoluto de la vida pública". El chantaje del gran demócrata.

La ira de la maquinaria estaba volcada contra "el hombre de conciencia ilustre que lo hará tan bien como yo en La Fortaleza", según fue proclamado por el gran caudillo cuatro años antes en el histórico Cholo García de Mayagüez; antes de que el cuerpo místico del partido, que no se acostumbraba sin la presencia del gran guía que le sacaba las castañas del fuego al popularismo, iniciara la peregrinación a La Meca de Trujillo Alto con los chismes propios de los cortesanos del poder.

Todo marchó según lo planificado. Ganó uno de los...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR