De Diego tenía razón

RAFAEL COX ALOMAR

ABOGADO

Y mientras caminábamos, hablábamos de la quiebra de Detroit y de cómo Puerto Rico, con indicadores económicos aún más comprometedores, va por igual camino porque no contamos con las herramientas para poner en marcha, de forma sostenida, un amplio proyecto de país.

¿Y cuáles son esas herramientas? Muy sencillo. Los poderes políticos necesarios para manejar desde aquí las variables económicas que inciden directamente sobre nuestras vidas. ¿Y cuáles son esas variables económicas? La transportación aérea y marítima (sujeta hoy a las terribles leyes de cabotaje), las reglamentaciones ambientales, laborales, bancarias, financieras, aduaneras, de propiedad intelectual y de telecomunicaciones, la cláusula de comercio interestatal (y sus implicaciones negativas) que coarta la capacidad de Puerto Rico para incentivar estratégicamente las industrias económicas en las que gozamos de ventajas comparativas, y, desde luego, el poder irrestricto del Congreso y de cientos de agencias federales sobre las que no tenemos el más mínimo control, pero que legislan y reglamentan todos los aspectos de nuestra vida económica.

Ante tal indefensión, más allá de apagar fuegos ocasionalmente, es poco lo que realmente se puede hacer para encaminar un proyecto de regeneración económica que nos emancipe de ese coloniaje económico que hoy nos tiene literalmente al borde del colapso. Y algunos preguntarán ¿colapso? Efectivamente. Con una deuda pública de $70,450,000,000 (equivalente al 97% de nuestro Producto Nacional Bruto) que francamente no podemos pagar, con una de las tasas de participación laboral más bajas del mundo de menos del 38%, junto a niveles de pobreza insospechados y al éxodo imparable de nuestra gente más productiva (a razón de 50,000 por año) no le puede quedar duda a nadie sobre la gravedad del asunto.

Toda vez se asimila y digiere esa realidad surgen de inmediato preguntas difíciles pero impostergables: ¿cuál es la posición del autonomismo ante todo ésto? ¿Cuál es su norte ideológico en esta difícil coyuntura? Intentar contestar estas preguntas con profundidad nos...

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