Lo divino detrás de cada cerveza
Munich
Por Wanda Mártir
Desde entonces el ser humano y la cerveza han sido inseparables y en el caso de los bávaros el vínculo es sagrado. En Baviera el Oktoberfest es sólo una de muchas fiestas populares en donde la cerveza es la verdadera protagonista. Aquí beber cerveza es cultura, no adicción.
Un buen ejemplo lo ofrece el tradicional "desayuno bávaro" que suelen tomar los obreros a media mañana. Este consiste de una copa grande de cerveza Weissbier rica en levadura acompañada de dos salchichas y un brezel.
Cuando en Baviera se habla de pan líquido o "flüssiges Brot", están hablando de cerveza. La expresión no proviene de un alcohólico sino de los monjes católicos durante la Edad Media. Estos aguantaban semanas en ayuno bebiendo la cerveza que se elaboraba en muchos de los monasterios bávaros. El alimento líquido no quebraba las estrictas normas del ayuno religioso.
Una leyenda de esa época cuenta que para aclarar las dudas acerca de la religiosidad de esa práctica, el Papa en Roma mandó a los monjes bávaros traerle una muestra de su cerveza. El largo viaje y la falta de preservativos provocaron que la cerveza se dañara en los barriles y cuando el Papa la probó sentenció que un líquido tan desagradable era una penitencia ideal para el tiempo del ayuno.
Hoy en día los monjes y hasta algunas monjas siguen elaborando en sus monasterios deliciosas cervezas. Y aunque la mayor parte de las 622 cervecerías de Baviera están en manos laicas, algunas conservan como marca el nombre de la orden que las fundó, ejemplos son la cerveza Paulaner y la Franziskaner, en cuya etiqueta se puede ver un monje franciscano, casualmente muy parecido al actual Papa Francisco.
La calidad de la cerveza alemana se ha conservado siempre con mucho celo. A las sentencias medievales de ahorcar a todo aquel que sirviera una cerveza de mala calidad siguió en el 1516 una ley que aún hoy se practica y publica en cada botella de cerveza alemana, la Reinheitsgebot o ley de la pureza que establece que la cerveza debe ser elaborada únicamente a base de agua, levadura, malta y lúpulo.
La Ley de la Pureza se ha adaptado a los tiempos para dar paso a algunas variaciones pero en su esencia todavía hoy la mezcla de sólo estos cuatro ingredientes es utilizada en la elaboración de la cerveza alemana. Las variaciones en la mezcla de los ingredientes determinan el sabor y el tipo de cerveza.
En los pasados años los boricuas le han cogido gusto a la gran variedad de cervezas artesanales e...
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