Encuentros con el papa

Por Gerardo E. Alvarado León

galvarado@elnuevodia.com

Joseph Ratzinger no me era del todo extraño. A tres meses de su elección, en abril de 2005, lo vi rezando el ángelus desde la ventana de su estudio, en el Vaticano. Aquel día fui uno más entre los miles que se congregaron en la plaza de San Pedro. No recuerdo qué dijo, pero sí haberme emocionado al oírlo hablar en español. Algo similar viví en Cuba, a donde viajaron cientos de boricuas a ser parte del penúltimo viaje apostólico fuera de Italia de Benedicto XVI.

El papa llegó a La Habana desde Santiago de Cuba, donde visitó el santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre. Los cubanos, sin embargo, no lucían tan emocionados ante su presencia... o al menos, no expresaban el mismo furor de cuando los visitó Juan Pablo II, en 1998. Así, quizás por curiosidad o verdadera convicción, miles acudieron a la plaza de la Revolución José Martí, donde el sumo pontífice ofició...

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