Cómo enfrentar las pérdidas

El distanciamiento social y los eventos de salud que continuamos viviendo por causa de la pandemia del coronavirus han generado pérdidas en diferentes dimensiones, que es necesario identificar y manejar por el bien de nuestra salud física y mental.Al hablar de pérdidas, no solo se hace referencia a la muerte. La limitación de nuestras actividades y socialización debido a las medidas de prevención, la falta de contacto físico con nuestros seres queridos, el desempleo y la falta de ingresos, la imposibilidad de cumplir la rutina y los hábitos. Todos son ejemplos de pérdidas que, en menor o mayor grado, nos provocan un luto y un dolor por esa ausencia, que es necesario enfrentar a tiempo.Por eso, la Asociación de Psiquiatría de Puerto Rico desarrolló y publicó la Guía Psicoeducativa: Manejo de Pérdidas y Duelo Durante la Pandemia del COVID-19. El documento no solo habla de las diversas circunstancias que suponen una pérdida a nivel individual o colectivo, sino también ofrece estrategias para manejar las mismas."Las circunstancias actuales crean un contexto en el cual las personas pueden estar manejando varias pérdidas concurrentes y llevando procesos de duelo casi de manera simultánea. No poder completar el proceso de duelo por una pérdida antes de experimentar una nueva hace que los procesos de duelo se acumulen, haciendo más prolongado el mismo. Ante esto, la forma usual en que enfrentamos y manejamos pérdidas, así como el duelo se ha tornado más difícil y compleja. Esto crea la necesidad de buscar formas alternas para enfrentar y manejar dichas pérdidas para poder sobreponernos a ellas", señala la guía, redactada por cinco psicólogas clínicas y una psicóloga escolar.No importa en qué dimensión de la vida sea, las pérdidas tienen en común lo siguiente: es algo que valoramos, ya sea un objeto, actividad o persona significativa; su ausencia provoca emociones o sentimientos; implica un proceso de duelo que durará el tiempo que la persona necesite para recuperarse; y requiere el reconocimiento de las emociones que se experimentan y el permiso a uno mismo para sentirlas en lugar de ocultarlas.¿Qué hacemos?Cuando la pérdida se trata de las rutinas o hábitos -como visitar una vecina o vecino, ir a la iglesia, salir a comer o ir al cine- puede preparar una lista de esas actividades que no puede realizar y otra, de rutinas que sí puede retomar aunque deba modificarlas debido al distanciamiento. Si siente tristeza, nostalgia o coraje por aquello que...

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