Espacio para mejorar

Por Damaris Hernández Mercado

dhernandez1@elnuevodia.com

El sábado pasado mi niña tomó el control remoto y cambió el canal infantil al de Puerto Rico TV (Canal 6). Tras distraerse con un rompecabezas de Toy Story 3, aproveché la oportunidad para conocer qué estaba transmitiendo el canal del pueblo.

Para mi sorpresa se trató del programa "Salsa, bomba y plena", producido por Puerto Rico TV en conjunto con la Fundación Rafael Cepeda. Digo sorpresa porque aunque había estrenado a las 7:00 pm. en abril, no lo había visto.

Los anfitriones Raulito Carbonell, Gilda Hernández y Jesús Cepeda son los responsables de presentar la riqueza de estos tres géneros musicales en nuestra cultura. El objetivo del programa es perfecto; qué mejor que utilizar el foro televisivo para educar y conocer la historia, costumbres y tradiciones de los cadenciosos ritmos que nos identifican como pueblo.

El problema estriba en la ejecución. Urge una mejor dirección. ¿A quién se le ocurrió que Gilda Hernández y Jesús Cepeda fueran anfitriones? Sin quitarle el mérito como profesionales y defensores de la cultura, ninguno de los dos tiene el dominio escénico ni la gracia necesaria ante las cámaras. Por momentos lucen perdidos cuando son ponchados por una cámara, no saben si pararse de lado o de frente y se proyectan muy robóticos. En fin, al "César lo que es del César".

Es Raulito Carbonell quien salva con su vasta experiencia la animación del programa. La integración de su personaje...

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