Espejismo económico
Por Gloria Ruiz Kuilan
gruiz@elnuevodia.com
Ese espejismo, con el que el gobierno de Fortuño dio la impresión de que las finanzas públicas habían mejorado, implosionó con la reciente degradación crediticia de las obligaciones del Gobierno central, por parte de Moody's Investors Service.
Y así quedó al descubierto el juego político con el que se trató el tema fiscal del país.
Al asumir el mando en el 2009, este gobierno saliente denunció que había heredado un déficit sin precedentes y gastos operacionales mayores a los recaudos. Esa herencia fue su argumento para imponer la famosa "medicina amarga" de principios del cuatrienio, que incluyó el despido de empleados públicos con la Ley 7 de Emergencia Fiscal.
En los últimos meses, la administración Fortuño enfatizó que llevó la economía de Puerto Rico a terreno positivo. Y lo ilustraba con indicadores la venta de autos, la baja en las quiebras y un repunte en la creación de empleos.
Sergio Marxuach, del Centro para la Nueva Economía, expuso que la administración Fortuño enfatizó en esos indicadores "sin poner el contexto completo, para dar la imagen de que la economía ya está boyante y estábamos saliendo de un hoyo".
"Tendían a presentar una imagen más robusta de lo que realmente era. Creo que Moody's sabía esto", dijo Marxuach.
El punto es que, mientras el pueblo escuchaba que se había "salvado la casa", el equipo económico del gobierno de Fortuño mostraba a las casas acreditadoras el estado de las arcas puertorriqueñas. Y no faltaron las advertencias de estas entidades de que había que tomar las medidas adecuadas para evitar la degradación del crédito.
"Donde más el Gobierno habló de una actividad irreal fue en la actividad económica: empleo, ventas de esto y lo otro", afirmó Marxuach.
"Estos indicadores vienen de una base muy baja. Reflejan esencialmente lo que todavía es una economía muy débil, y creo que eso es lo que les preocupa (a Moody's) que, aunque se ha estabilizado la economía, no la ven suficientemente robusta como para absorber unos cambios, como lo es la reducción en los fondos federales", agregó.
Había elementos suficientes que dejaban clara la delicada situación de las finanzas públicas. Un ejemplo es que el gasto público supera los recaudos.
"Sabemos que estuvieron mintiendo todo el tiempo. Eso se sabía. Todo el tiempo estuvieron mintiendo de que habían arreglado las finanzas cuando la situación del país se veía que no estaba nada de bien", dijo, por su parte, el economista...
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