Algunos estudiantes encantados, otros desilusionados

Por Keila López y Aurora Rivera

puertoricohoy@elnuevodia.com

Al otro lado de la verja, los alumnos de la escuela vocacional de educación especial Ramón B. López regresaron un semestre más a un plantel anticuado, sin los materiales y equipos suficientes para tomar sus talleres de carpintería y repostería y donde tomarán el curso de soldadura con tubos que llevó su maestra.

De esta manera inició ayer el segundo semestre de este año escolar en las escuelas públicas del País. Mientras el gobernador Luis Fortuño, el secretario de Educación Edward Moreno y otra decena de altos funcionarios del gobierno inauguraron la primera escuela entregada del Programa Escuelas para el Siglo 21, en Cataño. Mientras, en otras escuelas retomaron las clases con los problemas que año tras año plagan el sistema de enseñanza, como falta de materiales.

Uniformados con pantalones color crema y camisas azul turquesa, los maestros de la escuela elemental Rafael Cordero no cesaban de lanzar elogios a los cambios realizados a su plantel. Igual de asombrados se expresaron los estudiantes y los padres que llegaron al acto protocolar.

"La escuela vieja me gustaba también, pero esta está mejor. Parece una escuela superior", expresó la estudiante de sexto grado Dalaisha Jiménez.

"No hay nada más importante para Puerto Rico que ustedes, los jóvenes. Podemos tener las mejores carreteras, aeropuertos y puentes, pero si no tenemos a la gente mejor preparada, no vale de nada", expresó Fortuño poco antes de exhortar a los estudiantes a cuidar su nueva escuela. La segunda escuela para el Siglo 21 abrirá la semana que viene en Guaynabo.

A pasos de donde el gobernador hablaba frente a los niños de la Rafael Cordero, los estudiantes de la Ramón B. López no tenían los equipos para sus cursos ocupaciones. Sin embargo, el secretario de Educación afirmó que en unos meses les llegarán equipos nuevos para los tres tallares que al momento no operan adecuadamente.

En un recorrido que realizó este diario por la zona metropolitana, las escuelas de corriente regular -como la Rosendo Matienzo Cintrón de Cataño y la Luis Muñoz Rivera II en Guaynabo- iniciaron el curso sin mayores tropiezos. No obstante, la historia era otra en planteles especializados, como la escuela anexo Pedro Carlos Timothee en Puerto Nuevo para la población de educación especial. Su directora aseguró que la...

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