Fanático del arroz con habichuelas

Por Sandra Caquías Cruz

end.scaquias@elnuevodia.com

Doña Victoria, de 86 años, se había levantado muy temprano ayer con la satisfacción de poder cocinar para Luis Fortuño.

"Abel me ha llevado a cuanta esquina tiene este municipio, a sitios que yo creo que él no había ido antes, menos a su casa", expresó Fortuño de camino a la residencia del alcalde.

Afirmó que no conocía cuál sería el menú, pero que por su gusto comería arroz y habichuelas a diario. "Yo, con arroz, habichuelas y vianda estoy... y me tengo que esconder para comerlo, porque en casa no me lo dan", señaló el mandatario.

Explicó que en La Fortaleza su menú no es muy variado y que cuando no come pollo, entonces es pavo.

Don Hermenegildo Nazario, padre del alcalde, esperaba al gobernador en una silla del balcón. Mientras, varios miembros de la escolta de Fortuño custodiaban la humilde residencia.

La foto del alcalde Nazario es el primer golpe a la vista de todo el que entra a su hogar. Es una fotografía enorme, colocada en la pared frontal de la sala y que se puede ver desde la calle.

Otras fotos de la vida política del alcalde adornan las paredes de la vivienda. Allí no hay lujos, pero sí muchos gratos momentos plasmados en imágenes.

Lo estrecho del comedor no permitía que seis comensales ocuparan la mesa a la vez. Tampoco en la cocina había espacio para las muchas personas que querían ayudar a doña Victoria a servirle al gobernador, quien llegó hasta allí para saludar.

El alcalde aprovechó para explicar que su mamá -quien en realidad es su abuela paterna, pero él la obligó por el tribunal a que lo reconociera como hijo- se molestó...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR