Fe con matiz político

Por Gerardo E. Alvarado León

galvarado@elnuevodia.com

Con esas palabras, el sociólogo Manuel Torres Márquez describió la recién firmada ley por el gobernador Luis Fortuño, que establece que las más de 100 agencias gubernamentales contarán con un enlace o facilitador para los grupos comunitarios y de base de fe.

Según Torres Márquez, el estatuto, en lugar de fomentar la participación ciudadana, promueve la "segregación, marginación y exclusión" de sectores que no surgen de una iglesia o secta religiosa, pero también quieren formar parte del proceso decisional y de creación de política pública gubernamental. Los profesores, científicos y estudiantes, entre otros, son parte de esos sectores. "La administración Fortuño ha mantenido una relación preferente entre una organización comunitaria que responda a una secta religiosa y una que no. En un gobierno debería existir claramente la separación entre Iglesia y Estado, por lo que no debe haber trato preferente hacia esos grupos", comentó el sociólogo. Agregó que, "aunque parezca simpático", el enlace o facilitador en cada agencia podría convertirse en un empleado gubernamental que se dedique a coordinar actividades (políticas) en los barrios, a buscar simpatizantes con los ideales del Gobierno y a identificar quiénes son los líderes con más poder de convocatoria. "Todo ésto inicia la caza de votos en ruta hacia las próximas elecciones (en noviembre de 2012). Estos enlaces o facilitadores no van a estar ahí para mejorar el desarrollo y capacidades de los grupos...

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