Hubo fiesta en Nueva York

NUEVA YORK.- Gilberto Santa Rosa estaba ayer doblemente encantado, tras participar del Desfile Puertorriqueño de Nueva York como su Gran Mariscal y la noche anterior haber recibido un caluroso recibimiento como invitado especial del concierto de celebración de los 55 años de El Gran Combo en el Madison Square Garden.

“He vivido parte de mi carrera en Nueva York. Para mí es un gran honor ser el Gran Mariscal”, dijo Santa Rosa, mientras iba en un carro descapotable por la Quinta Avenida.

El salsero boricua, a quien se conoce como “El Caballero de la Salsa”, había sido antes padrino del Desfile, junto a la merenguera Olga Tañon.

Pero, esta vez era el principl homenajeado del Desfile, que estuvo marcado por la controversia en torno al premio que se ofreció otorgar al ex prisionero político puertorriqueño Oscar López Rivera.

Con respecto a la polémica en torno a López Rivera, quien declinó el homenaje como Prócer de la Libertad para quitarle presión a la dirección del Desfile y a políticos como el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, Santa Rosa prefirió no tomar partido.

“Por primera vez voy a dejar una controversia al lado. Creo que hoy es día para los que vinimos y participamos. Tengo mi opinión pero no quiero darla porque podría herir a cualquier de los dos bandos”, sostuvo el sonero boricua.

La jornada de ayer, dijo, debía ser “una fiesta de unidad”.

“Nos celebran una fiesta porque tenemos una historia en esta ciudad. El Desfile ha cumplido 60 años y es meritorio que una cultura se mantenga (con fuerza) en esta ciudad”, dijo Santa Rosa.

Previo a la gala del...

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