A fuego el bolsillo boricua

Por Ricardo Cortés Chico

rcortes@elnuevodia.com

Un área de juegos acuáticos en el parque Julio E. Monagas, en Ponce, solucionaba temporeramente su problema. "Buscamos sitios donde haya agua para desperdiciar y escapar del calor. Lo otro es irnos a un 'mall', aunque no compremos nada, solo para estar en el aire acondicionado", explicó la mujer, de 53 años y vecina de Juncos.

Era una situación que se repetía entre muchas de las familias que visitaban ayer el parque. Lizbeth González, de 22 años y vecina de Guayama, casi repitió las palabras de González sobre el aire acondicionado, al decir que "en estos días lo tenemos prendido todo el tiempo aunque se gaste más en electricidad".

El amplio uso de aires acondicionados, precisamente, es uno de los principales factores que ha disparado el consumo energético en el país desde mayo, explicó Salvador Serrano, jefe de la subdivisión de Operaciones del Sistema Eléctrico en la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).

En un periodo de cuatro semanas, que comprende del 27 de mayo al 24 de junio, la demanda por electricidad en las horas pico de consumo aumentó en 8.8%.

El consumo de agua potable ha registrado también patrones de aumento, aunque no tan drásticos.

Mayra Encarnación, directora de Seguridad Corporativa y Emergencias de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA), explicó que en algunas plantas, como la que alimenta el superacueducto, se ha experimentado un aumento de 1% desde mayo. En la planta Enrique Ortega, que suple el lago La Plata, el aumento desde enero ha sido de un 4.3%. "Siempre hay un patrón de aumento en el verano por el calor... Este es el tiempo en que tenemos problemas porque la gente empieza a abrir los hidrantes", explicó Encarnación. Esta práctica preocupa a la agencia, porque baja la presión de agua en las tuberías afectando el servicio, en ocasiones, a abonados sensitivos como son los hospitales.

Ayer no se pudo precisar cuántos dólares y centavos implican estos aumentos para el consumidor promedio. No obstante, la relación económica es sencilla: en la medida en que el consumo de servicios públicos aumenta, mayor es el gasto de los boricuas por el calor.

Este año, el impacto económico del calor no es común debido a que, según los registros del Servicio Nacional de Meteorología (SNM), las temperaturas se han mantenido muy altas.

El meteorólogo del SNM, Ernesto Rodríguez, explicó que desde el 30 de mayo las temperaturas máximas se han mantenido sobre los 90 grados...

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