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Glorimari no se comprometió a pagar los contratos

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Por Sandra Caquía Cruz

scaquias@elnuevodia.com

Ambos deambulantes se encontraron ayer en la plaza pública de Guayama. Hablaron poco y usaron el tiempo para contemplar la fachada de la recién remodelada Casa Alcaldía. Mientras, la noticia de que se quedaron finalmente sin empleo les esfumaba sus sueños.

Ellos son parte de las 60 personas que fueron contratadas para trabajar en las diversas dependencias del municipio a través de una propuesta federal que recibe el Instituto Socio-económico Comunitario, conocido como Insec. Esta es una corporación que provee servicios a comunidades de escasos recursos.

La misión de Insec es facilitar la superación de la pobreza y asegurar la autosuficiencia económica de las personas de escasos recursos.

Los 60 empleados de Guayama, incluidos González Torres y Cordero, están desde el martes en la calle. La alcaldesa Glorimari Jaime rechazó que les haya hecho una "promesa verbal" de extenderles hasta el 30 de noviembre el contrato que tenían con Insec, como explicó la portavoz de los desplazados, Yarimar Rodríguez.

"Yo no puedo botar a nadie si ni siquiera tenía el dinero para pagarles. Ese contrato lo hizo Insec. La gestión de queja debió ser en contra de la directiva de Insec", dijo Jaime tras participar de una reunión de la Federación de Alcaldes.

González Torres, quien trabajó en Obras Públicas, bajó la cabeza mientras sus compañeros, una de ellas en silla de ruedas, otra paciente de cáncer y un joven cuya esposa está a punto de tener un bebé, hablaron de la necesidad que tienen de que les paguen las horas trabajadas. El hombre no contestó qué hará ahora que no tiene empleo.

Explicó que duerme en su carro, el cual estaciona todas las noches frente a la residencia de Zoraida Fonseca, en la urbanización Carioca. "Ella me ayuda, me da comida y eso", dijo cuando la voz lo traicionó. "Yo no uso droga", aseguró el hombre, de 41 años.

"Ese muchacho ha sido excelente. Entra a casa y ni nos mira. Él baja la cabeza. Es bueno. Mi vecina le da la comida. Yo le doy el desayuno. Lo dejo bañar y él lava la ropa en casa", dijo Fonseca. González Torres deambula hace un año. Estuvo preso por golpear a su mamá.

Mientras, Cordero, quien duerme en los bancos de la plaza pública, dijo que cuando llueve acude a...

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