GRAN COMPETIDOR

Por Luis Santiago Arce

larce@elnuevodia.com

Hoy, aquel niño, que entonces rondaba los 10 años de edad y de nombre Lino Rivera, es un exlanzador profesional que se ha convertido en un dirigente ganador en el béisbol invernal boricua, en busca en estos días con los Criollos de Caguas de su cuarta corona en cinco series finales disputadas en igual cantidad de temporadas como técnico.

"Siempre le dije a la gente que aunque no llegara a ser buen pelotero, Lino iba a ser algo importante porque era un muchacho bien inteligente y le gustaba la competencia. Siempre ha sido un competidor", dijo Verdejo.

Verdejo finalmente adquirió a Rivera para el dominante equipo Royal Crown que fue sorprendido por Cafetería Las Américas en la postemporada de la categoría 'senior' en 1978.

Macho, además, se convirtió con el tiempo en una figura paternal, asesor y amuleto para Lino, quien 'no lo suelta ni en las cuestas'.

También se mantiene fielmente apegado, no importa la distancia, a su familia y allegados, que lo reciprocan con genuino cariño y orgullo.

"Siempre pensé que Lino iba a ser exitoso por una sencilla razón: que siempre fue un trabajador incansable desde que éramos pequeños. Era el primero y el último en el parque, y en el terreno siempre fue un líder", comentó el amigo de la infancia de Rivera y ahora parte de su cuerpo técnico en Caguas, Gilberto Martínez.

"No me atrevería a decir que pensé desde aquel momento que Lino iba a ser un buen dirigente, pero sí que lo que fuera a hacer iba a ser exitoso", agregó el también ex pelotero.

La familia, asimismo, se emociona con las conquistas de Rivera. Su esposa, la mexicana Helga González, destacó con una amplia sonrisa que "como boricua, Lino se transforma...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR