Gran júbilo con los Criollos

Este año la temporada regular de béisbol profesional constó solo de 18 partidos. Esto fue así luego de grandes esfuerzos para evitar suspender el torneo. Las asistencias a los estadios eran bajas en un país agobiado por los efectos de un devastador huracán y de una clase política casi incapaz, con contadas excepciones.

Con este escenario de fondo, los Criollos de mi pueblo se proclamaron campeones de la isla al vencer a Santurce en la serie final, jugando como locales en el pueblo de Gurabo. El próximo paso era la Serie del Caribe en México. Allí nos ibamos a encontrar con lo mejor del béisbol cubano, mexicano, venezolano y dominicano a nivel de ligas de invierno que jugaron sus series regulares y de post temporada de manera completa.

Admito que mis esperanzas no...

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