Habilidoso para el crimen

Por Limarys Suárez Torres

lsuarez1@elnuevodia.com

Así describieron a Candelario Santana en diciembre varios neuropsicólogos que lo evaluaron para conocer si padecía de retardación mental, y luego detallaron en la sala del juez federal José A. Fusté el bagaje que tenía quien ahora es el séptimo acusado en enfrentar en Puerto Rico la pena de muerte en el Tribunal Federal.

De acuerdo con esos informes, Candelario Santana, de 41 años, presentó en su desarrollo un nivel bajo de escolaridad, fallando en completar el primer grado y teniendo que repetirlo, y luego exhibiendo problemas en quinto grado, y nuevamente desaprobando todas sus clases en séptimo.

Según María Margarida Juliá, la neuropsicóloga contratada por la defensa de Candelario Santana en su intento por probar su retardación -y su inelegibilidad para la pena de muerte-, el hombre abandonó su hogar a los 15 años de edad; un tiempo más tarde se mudó a Nueva York, y allí, a los 17 años, trabajó durante un año en una fábrica.

Luego vivió en Detroit, Florida y Boston, pero siempre regresaba a la Isla.

Amante del boxeo y de las motoras, practicó por varios años el pugilismo, pero a partir de los 18 años comenzó a exhibir una vida delictiva en la que llegó a acumular 60 convicciones por diversos delitos, entre ellos 12 asesinatos ventilados en los tribunales de San Juan, Bayamón y Carolina.

El hombre, que enfrenta la posibilidad de convertirse en el primer puertorriqueño en ser condenado a la pena de muerte, desde 1927, enfrentó repetidas acusaciones por violación a la Ley de Armas, asesinato en primer grado, asesinato en segundo grado y tentativa de asesinato.

El neuropsicólogo Jorge Herrera, quien, contratado por la Fiscalía federal, evaluó también a Candelario Santana antes del inicio del...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR