El 'hechizo' de las matanzas por drogas

Rafael Gutiérrez Pedrón

San Juan

El hecho de hacer un producto con mucha demanda ilegal multiplica el precio del producto en el mercado haciéndolo un negocio excesivamente lucrativo, ya que el producto que se produce a un costo irrisorio deja ganancias excesivamente tentadoras para los sedientos avariciosos que quieren enriquecerse en corto tiempo.

En la nueva economía se le llama "fast track". No hay requerimientos de estudios, experiencia, recomendaciones ni certificados de buena conducta para reclutar empleados; y por la buena paga son fáciles de reclutar, o no sé si la palabra debería ser "reciclar".

Ya esto quedó más que probado y demostrado en la época de la prohibición del alcohol. Por lo tanto, como los sedientos avariciosos no tienen código de ética ni moral, buscan la manera más eficiente en cuanto a tiempo y dinero para robustecer su negocio. Matar a su competidor.

"Para buenos entendedores, pocas palabras bastan", "El que...

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