Hermanas Ponce se declaran culpables

La ayudante especial de la extitular de Educación Julia Keleher, Glenda Ponce, se declaró culpable ayer de conspirar para cometer fraude electrónico relacionado con un contrato de $95,000, que el Departamento de Educación le otorgó a la compañía Colón & Ponce, de su hermana Mayra Ponce Mendoza.Ambas hermanas se declararon culpables ayer, en una vista celebrada por videoconferencia.El cambio de alegación surgió en momentos en que la defensa de Keleher presentó una moción para desestimar los cargos en su contra, por entender que no contiene evidencia de que "pretendiera recibir un soborno u otro beneficio monetario".De acuerdo con la acusación, Glenda Ponce Mendoza utilizó su puesto de ayudante especial de Keleher para proveer información a su hermana Mayra que le ayudara a preparar la propuesta de servicios, lo que supuso una ventaja indebida sobre las demás compañías que participaron en la licitación.El resultado del acuerdo estaba predeterminado porque presuntamente Keleher obligó a los empleados a...

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