El hombre de la convergencia

ORLANDO, Florida.- Jimmy Torres Vélez logró lo impensable en la Florida Central: unir a la diversa y fragmentada diáspora puertorriqueña en este estado en una sola voz y en un solo músculo humanitario para asistir a los damnificados en Puerto Rico por el huracán María. Entonces, ese empeño altruista logró adherirse bajo la Coordinadora de Apoyo, Solidaridad y Ayuda, una iniciativa cuyas siglas -CASA- no fueron una casualidad o un mero y simpático juego de palabras. Fue una gesta intencional parar demostrar los "milagros" que la diáspora boricua en Florida es capaz de hacer cuando deja de fijarse en sus diferencias, en los matices ideológicos o económicos que los separan para echar mano del arsenal de elementos que tienen en común. Ese es el mantra del sindicalista y líder comunitario Torres Vélez: apostar a una convergencia entre los boricuas aquí, de la misma manera que lo hicieron los cubanos en el sur de Florida que lograron, a pesar de sus grandes diferencias, abrazarse a los aspectos que los unen sumado a la promesa de nunca dejar de hablar de su país. Fue la receta que los convirtió en una poderosa turbina económica y política. Torres Vélez sabe que los boricuas en Florida son más en términos numéricos, y está convencido que esa integración avanzará a pasos agigantados si el tema político y las diferencias en torno al futuro del estatus de la isla se echan en el bolsillo.¿Cuándo llegaste a Florida?—Llegué en el 2012 a ayudar a movilizar, en Miami, el voto de los retirados de la Service Employee International Union a favor de Obama. Mi trabajo era asegurar que salieran a votar. Luego de eso, la unión me preguntó si me quería mudar, y les dije que sí, que a Orlando, pues sabía de la gran cantidad de puertorriqueños allí, y porque entendía que mi experiencia ayudando a organizar votos podía ayudar. Llegué, y me enamoré de la gente y de la comunidad.¿Y antes de Florida?—Trabajé en Puerto Rico, desde 1998, en el proyecto de sindicación y en temas de salud, especialmente con la Unión General de Trabajadores (UGT). Luego, en el 2012, corrí la seca y la meca en California, Massachusetts, Pensilvania, en diferentes proyectos del sindicato. Ya acá, en Orlando, he estado como en una relación simbiótica entre lo sindical y lo comunitario, que es algo que acá, en Estados Unidos, se usa intensamente, no en Puerto Rico, y que es uno de los problemas que tenemos, porque todo se mira por los partidos políticos y no importa la actividad comunitaria en...

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