Homenaje a la viday sus centenarios

Por Carmen Graciela Díaz

Especial El Nuevo Día

Ese es el espíritu de "Marco centenario", la escultura del artista plástico Antonio Martorell que se encuentra en el Parque Julio Enrique Monagas de Ponce y que se cifró, entre otras cosas, para motivar a que se deje de ignorar la vejez y celebrar a los centenarios.

La pieza, que se develó ayer, se compone de un portarretrato y un banco que se hallan bajo una ceiba, en espera de personas que se quieran retratar. "El marco es un portarretrato esperando por la fotografía que ha de ser tomada en cualquier instante, tan pronto tome asiento el visitante", explicó Martorell sobre la pieza en acero inoxidable que exhibe los nombres calados, en caligrafía, de sobre 150 centenarios.

Al artista le divierte que, con esta pieza, "los espectadores se convierten en actores y colaboradores de una obra de arte", tras considerar que, cuando las personas se sienten en la pieza, se tomen una foto y la suban a las redes, la obra consigue "una vida multiplicada".

Con su verbo ágil y reflexivo, este hacedor creativo observa que "en nuestra sociedad se pone un énfasis extraordinario en la juventud y siempre se ignoran tres factores de la vida que son inexorables: la enfermedad, la vejez y la muerte".

Martorell recuerda que cuando él era un niño los ancianos eran motivo de respeto. Esa veneración a la gente de edad avanzada se ha perdido.

"Estoy empeñado en...

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