Inmersa en el personaje

Por Patricia Vargas

pvargas@elnuevodia.com

Pero fue durante el proceso de filmación de la película Infancia clandestina, que se exhibe en la Isla en Fine Arts, basada en la vida del director argentino Benjamín Ávila, que se recrudecieron sus recuerdos. Natalia interpreta a Charo, la madre desaparecida de Juan.

"Es una historia muy dramática, que nos pega muy de cerca y era muy importante entender lo que estaba sucediendo en ese momento de la historia. Tuve que entrenarme en el uso de armas porque esta familia, luego de vivir en el exterior, regresa a Argentina con nombres falsos y se incorpora al grupo Montonero, que luchaba en contra de la dictadura y vivían armados", sostuvo la actriz.

La historia, que ganó Mejor Película en los Premios de la Academia de Cine Argentina y fue nominada a los premios Goya, transcurre en la Argentina de 1979 y está contada desde la óptica de Juan (Teo Gutiérrez Romero), un niño de 12 años que vive en la clandestinidad como Ernesto. El actor argentino Ernesto Alteiro interpreta al padre del niño.

"Durante la filmación, se vivió un clima de mucha emotividad. Mientras Ávila dirigía las cámaras, sentíamos su emoción y su respiración. Él ponía una foto de su madre desaparecida en el set. Pienso que era una manera del director exorcisarse de todo lo vivido. Es la primera vez en mi vida que me costaba salir del personaje y llegaba a mi casa muy agotada. La película trasciende el hecho histórico. Cuando se exhibió en el Festival de Cannes, la gente aplaudía de pie. La emoción es tan fuerte que traspasa la pantalla".

La...

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