LOS JUEGOS DE LA IDENTIDAD

Por Carmen Graciela Díaz.Especial El Nuevo Día

Esa intención es el fundamento de la muestra Loop-Bífido, que presenta hasta marzo en la galería Biaggi y Faure Fine Art en Puerto Nuevo y se prepara para un encuentro con el público el próximo sábado desde la 1:00 p.m.

Mero cuenta que ha pretendido partir de claves gráficas y conceptuales de la industrialización en Puerto Rico entre los años 50 y 60 entremezcladas con símbolos del presente.

"En Puerto Rico tenemos unos lapsos vacíos de lo que es la historia del arte aquí. Sabemos más lo que pasó en Europa y Estados Unidos que lo que pasó en Puerto Rico, y los cincuenta y los sesenta también fueron una época bien efervescente en el arte puertorriqueño, especialmente en el cartel", dice en torno a cómo el vocabulario visual de esa década compaginaba con las inquietudes que lo llevaron a esta propuesta donde reúne pinturas en mediano y gran formato trabajadas en clave de medios mixtos.

El tema de la afirmación de la identidad (tan cultivado, por ejemplo, por los artistas de la Generación del 50) lo sedujo de manera inevitable, en este caso a través de la publicidad.

"No me gusta el panfleto, el cliché del coquí, de la garita, del cerdito, de la bandera en el juego con la identidad. Creo que es importante, pero ya pasamos eso. Para nuestra generación es bien importante el Internet y la televisión, y yo uso esos elementos para crear esa mezcla que somos realmente", cuenta acerca de la exhibición en la que presenta una dualidad de imágenes como sucede en la obra Con usted, donde el espectador observa un retrato del artista del siglo XIX, Francisco Oller, y cerca uno de los personajes de la serie animada infantil Dora, la exploradora, Swiper.

La repetición es otro de los elementos claves en la obra de Mero, una de sus armas discursivas y estéticas. Por medio de ella trae en esta muestra referencias a los cincuenta, pero con claros indicios y retóricas del siglo XXI. "Encontré que en esa época habían muchos anuncios machistas que a la larga los veo súper graciosos, pero que en la época no lo eran. La mujer estaba en una esquina, y entonces junté el humor y la ironía", menciona del proceso creativo que se nutrió, en parte, del tiempo que trabajó en la Fundación Luis Muñoz Marín repasando pedazos de la historia.

La quinta exhibición individual...

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