Latente el miedo a inundaciones en la isla

Siguen en la memoria colectiva. Son los recuerdos de aquella noche, de aquel sonido de gorgoteo, de aquella masa amorfa desplazándose por las calles de Levittown. Son los residentes trepados en los techos de sus casas, en la penumbra, mientras el agua devoraba los primeros pisos y crecía sin piedad. Son negocios y hogares de San Juan engullidos en aguas negras. Son las marejadas desgastando barrios en Loíza, y los ríos desbordándose. Es la tétrica imagen de personas ahogadas. Es la pérdida de comercios y hogares, sudor y recuerdos en distintos municipios de la isla.

A más de nueve meses del huracán María, y en medio de una nueva temporada ciclónica, estos escenarios se podría repetir porque salvo por medidas a corto plazo de prevención y limpieza que se han tomado, ninguna otra circunstancia ha cambiado dirigida a mitigar los serios problemas vividos durante el huracán María.

“La seguridad (de que no vuelva a ocurrir) es cero. No se ha tomado ninguna acción eficiente”, opinó Jesús Herbón, dueño de la panadería Kasalta, en el sector de Ocean Park, en San Juan.

En ese momento, el sol del mediodía repicaba contra los cristales teñidos del emblemático negocio. Pero, hace nueve meses, cuatro pies de agua se colaron en el local. La calle McLeary se convirtió en río por el que los rescatadores navegaban en kayaks cuando no caminaban engullidos hasta la cintura.

“Es una sensación de impotencia. No hay nada concreto ni finalizado. La burocracia gubernamental va lenta. Creo que estamos iguales”, recalcó el comerciante.

medidas a corto plazo

La secretaria del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), Tania Vázquez, indicó que las casas bombas, que, durante el huracán María se quedaron inservibles por la falta de energía eléctrica, cuentan ahora con bombas portátiles y generadores de repuesto, por lo que estima que no volverán a fallar en un momento de emergencia.

“Para la tranquilidad de todos los residentes, las casas bombas funcionan (pero) los municipios tienen que hacer lo propio, que es destapar las alcantarillas... Si se tapan con escombros o sedimentación, el agua no llega y no se prende la casa bomba”, destacó.

El Municipio de San Juan no respondió a la petición de entrevista de este medio sobre las medidas de mitigación que han tomado.

En tanto, con el millón de dólares que el gobierno central asignó a cada municipio, el alcalde de Toa Baja, Bernardo “Betito” Márquez comprará equipo para limpiar los canales de agua y las...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR