Sentencia de Tribunal Apelativo de 31 de Octubre de 2014, número de resolución KLAN201301588

EmisorTribunal Apelativo
Número de resoluciónKLAN201301588
Tipo de recursoApelación
Fecha de Resolución31 de Octubre de 2014

LEXTA20141031-019 Pueblo de PR v. Almonte Olivence

ESTADO LIBRE ASOCIADO DE PUERTO RICO

TRIBUNAL DE APELACIONES

REGIÓN JUDICIAL DE SAN JUAN Y GUAYAMA

PANEL IV

EL PUEBLO DE
PUERTO RICO
Apelado
Vs.
JUAN G. ALMONTE OLIVENCE
Apelante
KLAN201301588
Apelación procedente del Tribunal de Primera Instancia, Región Judicial de San Juan. Criminal Número: KVI2012G0053 KLA2012G0494 KLA2012G0495 Sobre: Art. 106 CP 1er grado, Art. 5.04 LA, Art. 5.15 LA

Panel integrado por su presidenta, la Juez Fraticelli Torres, la Juez Ortiz Flores y el Juez Ramos Torres.

Ortiz Flores, Juez Ponente

SENTENCIA

En San Juan, Puerto Rico, a 31 de octubre de 2014.

Comparece ante nosotros el señor Juan G. Almonte Olivence (Apelante) mediante recurso de apelación y solicita que dejemos sin efecto una sentencia dictada por el Tribunal de Primera Instancia, Sala de San Juan (TPI) del 13 de septiembre de 2013.

Celebrado el juicio, un jurado encontró culpable al Apelante por infracción del Artículo 106 del Código Penal (asesinato) y los artículos 5.04 (portar) y 5.15 (disparar o apuntar) de la Ley de Armas, infra. Al Apelante se le impuso como pena los términos de noventa y nueve (99) años por el asesinato, así como veinte (20) años y diez (10) años por los artículos 5.04, y 5.15, respectivamente, de la Ley de Armas, a cumplirse de forma consecutiva.1

Con el beneficio de la Transcripción de la Prueba Oral, el Alegato del Apelante, así como de los autos originales,2 procedemos a resolver.

I

Surge del recurso presentado ante nuestra consideración que los incidentes que dan lugar al presente recurso se remontan al 3 de abril de 2012.3 Esa mañana, José Jován Santana Hernández (Santana) recogió a su amigo José Luis Varela Salgado (Varela) para ir a la playa de Ocean Park.4 De camino a la playa, los jóvenes se detuvieron en una gasolinera y adquirieron cervezas para consumir en la playa.5 De camino a la playa también se toparon con Carlitos, cuyo nombre de pila es Carlos Pérez, y juntos se dirigieron a Ocean Park.6 Carlitos siguió a su primo, Varela, y a Santana en su propio vehículo de motor, un Honda Accord deportivo color gris.7

La caravana llegó a la playa. El trío estuvo consumiendo cervezas y vodka, y fumando marihuana.8

Esa tarde, luego de disfrutar de un día de playa, los jóvenes acudieron a un restaurante de comida rápida cercano. La caravana llegó hasta el restaurante Wendy’s, ubicado en la calle Loiza en San Juan, y estacionaron sus vehículos de motor.9 El trío entró al restaurante e hicieron la fila para ordenar.10 Los primeros en la fila eran unos “muchachitos”, a los que Varela describe como unos “surferitos”.11 Los siguientes en la fila, segundos en turno, eran un muchacho “flaquito, trigueñito, de camisa negra y pantalón mahón corto negro” junto a otro muchacho “llenito, blanquito, de pantalón azul mahón y camisa negra”.12 Durante el juicio, Varela testificó que el muchacho “flaquito, trigueñito de camisa negra” era el Apelante.13 Finalmente, los últimos en la fila eran Varela, Carlitos y Santana.14

Varela testificó que en el restaurante había otros “surferitos” que no estaban haciendo la fila, sino en las mesas.15 Los “surferitos” que estaban en las mesas se acercaron a los “surferitos” que estaban en la fila y ordenaron su comida.16 Ante esta situación, Santana recriminó a los “surferitos” que se acercaron y les imputó que se habían “colado”.17 Santana también arremetió en contra del Gerente del restaurante al decir: “que cabrón el gerente, cara de pendejo que tiene”. Simultáneamente, un individuo vestido con camisa negra y pantalón mahón azul, intervino y le dijo a Santana que “no se la apuntara con los chamaquitos”, a lo que Santana replicó al joven de la camisa negra que no fuera “presenta’o”.18

El Gerente percibió olor a alcohol expedido por Santana y Varela, y que este último presentaba dificultad para sostenerse de pie.19

El individuo de la camisa negra salió del restaurante, y realizó un ademán que Varela entendió como una invitación a pelea.20 Posteriormente, el individuo regresó al interior del restaurante, recogió su comida y se marchó del restaurante junto a un acompañante, descrito por Varela como un hombre blanco y gordo, a los cuales perdió de vista.21

Santana luego salió del restaurante y buscó una cuchilla plegadiza en el vehículo que utilizaba ese día, la abrió y se la colocó en el espacio entre su pantalón y su cintura.22

Varela intentó infructuosamente convencer a Santana de que se marcharan del lugar, pero Santana se negaba, acotando que se quedaba allí para “resolver esto”.23

Luego salieron hacia el estacionamiento del restaurante y al no dar con las personas que observaron en el interior del local, salieron del estacionamiento y continuaron la marcha a pie en medio del carril de la calle Loiza en dirección al Municipio de Carolina.24 Es entonces cuando un vehículo Toyota 4Runner color champán y “bien tinteada” transitó en la dirección opuesta, 25

se detuvo junto a Santana y el pasajero de dicho vehículo—identificado como el mismo joven trigueñito de camisa negra con el cual Santana había intercambiado palabras en el interior de restaurante Wendy’s—se desmontó del asiento con arma de fuego negra y gris en sus manos.26 El hombre joven y trigueño de la camisa negra dejó la puerta abierta y sosteniendo la pistola con una de sus manos abrió fuego en contra de Santana, haciendo dos o tres detonaciones.27

Por su parte, Varela se protegió detrás de un poste de alumbrado eléctrico,28 desde donde pudo ver los fogonazos, escuchar de dos a tres detonaciones y observar el rostro del atacante.29

Varela expresó que relató que Santana “cayó a sus pies” porque estaba “medio ido”, “no estaba consciente” porque estaba “asustado” después de los disparos.

30

Varela también observó unas imágenes de video, y expresó que estas reflejaban lo que había contado.31

Además, Varela expresó que luego de salir de la playa se sentía alerta y que el consumo de cervezas y marihuana no afectó su capacidad para ver lo que ocurrió en la calle el 3 de abril de 2012. 32

Carlitos llegó al lugar de los hechos en su auto y junto a Varela colocaron a Santana en el asiento del pasajero delantero, y lo condujeron hacia el Hospital San Jorge de San Juan.33

Varela expresó que, si bien Santana tenía un cuchillo, este nunca pudo sacar el mismo y siempre se mantuvo entre la piel y el pantalón de Santana hasta llegar al hospital.34

Luego de recibir la asistencia médica de rigor, Santana fue declarado muerto. La enfermera de turno observó una cuchilla entre la cintura y el pantalón.35

Entretanto, la esposa de Santana recibió una llamada informando del incidente.

Al arribar al hospital, la esposa de Santana vio a Varela, y le pareció aturdido, nervioso y confundido, al igual que todos los presentes.36

Declaró además que no percibió olor a alcohol ni le dio la impresión de que Varela había estado borracho.37

El Agente Robert Rivas Jiménez (Agte. Rivas) de la Policía de Puerto Rico fue el primer agente en escena. El Agte. Rivas observó varias manchas de sangre y dos casquillos de bala.38

Rivas asumió la función de agente custodio y ordenó acordonar la escena desde la calle Benítez Castaño hasta el cruce con la calla Las Palomas. También, el Agte. Rivas verificó la existencia de heridos, y contactó a servicios técnicos y al Instituto de Ciencias Forenses.39

Por su parte, el Agente Luis Cordero Quiñones (Agte. Cordero) se encontraba de turno en la División de Homicidios de San Juan cuando ocurrió el incidente, por lo que se trasladó al lugar cuando fue alertado. 40 En la escena, el Agte. Cordero conversó con el Agte. Rivas, quien indicó que la víctima había sido trasladada de la escena y eventualmente falleció.41

El Agte. Cordero también recibió una versión de que tres jóvenes en Wendy’s sostuvieron una discusión con dos personas que se encontraban previamente en el lugar. También se le informó al Agte. Cordero que había testigos que escucharon disparos.

Además, el Agte. Cordero entrevistó al Gerente de Wendy’s e intentó acceder las cámaras de seguridad del local. El Gerente le explicó que era imposible acceder al disco duro de ese modo, pues las mismas operaban en un sistema de circuito cerrado controlado externamente. Debido a ello, el Agte. Cordero hizo constar la existencia de las cámaras en su bosquejo de escena, así como la dirección del local donde podrían recuperar los videos.

Por otro lado, el personal del Instituto de Ciencias Forenses (Instituto) recibió el llamado para atender la escena en la calle Loíza, intersección con la calle Las Palomas, con una persona muerta a las 6:50 p.m. El equipo investigador de turno acudió al lugar a realizar su labor.42 Una vez allí, Obed Dilán Rodríguez (Dilán) asumió la función de investigador primario.43 De otra parte, Ana Arroyo Sánchez (Arroyo) estuvo encargada de tomar fotos y videos.44

Debido a que la escena era en una carretera recta, el personal del Instituto utilizó el método de búsqueda lineal para dar con posible evidencia de la comisión del delito.45

El examen permitió que recuperaran dos casquillos de bala calibre .40, y tres manchas de aparente sangre. Sin embargo, Dilán no observó un patrón de sangre compatible con que Santana hubiese sido arrastrado o movido.46 Sin embargo, los técnicos forenses encontraron una mancha de aparente sangre en el lado izquierdo del bonete de una guagua estacionada en el encintado de la calle Loíza.47

Posteriormente, el personal del Instituto y de la Policía de Puerto Rico se trasladó al Hospital San Jorge para hacer un examen preliminar del cadáver e identificar su vestimenta y pertenencias, así como signos de violencia del cuerpo de Santana.48

Como vestimenta, el cuerpo tenía camisa blanca, medias cortas blancas, pantalón corto azul y negro, calzoncillos color crema y calzado deportivo negro.49

En cuanto a pertenencias, tenía dos pantallas plateadas con piedras blancas y una cuchilla color gris localizada al lado...

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