Migración masiva le presenta nuevo reto al deporte

Los vientos catastróficos del huracán María se encontraron en nuestra isla con las cenizas de una economía pulverizada, terminando de destrozar lo que por décadas conocimos como Puerto Rico.

La catástrofe causada por María aceleró la migración, mayormente hacia Estados Unidos. Según estimados, la cantidad de personas que han dejado la isla desde el 20 de septiembre debe estar rozando un cuarto de millón de puertorriqueños.

Y eso trastocó todos los niveles y todos los ámbitos, incluyendo el deporte.

Más allá de los torneos cancelados y las instalaciones destruidas, los efectos de María incluyen el éxodo de niños, jóvenes y adultos que participaban de ligas, torneos y clubes a lo largo y ancho de la isla. Algunos ya hasta habían representado internacionalmente a Puerto Rico.

Esto crea un problema momentáneo para la continuidad del deporte isleño, pues los que se marchan dejan huecos en los programas o instituciones que abandonan.

Sin embargo, a juicio de varios líderes federativos del país, a largo plazo este impacto podría tornarse en positivo para el movimiento olímpico, pues esos atletas siguen siendo elegibles para representar a Puerto Rico y su desarrollo en Estados Unidos será en un nivel más alto que al que estaban acostumbrados acá.

“Puerto Rico, históricamente, ha tenido episodios de transformación en los que los puertorriqueños se han ido de forma masiva. El que estamos viviendo es tan solo el más reciente”, manifestó la presidenta del Comité Olímpico de Puerto Rico (Copur), Sara Rosario.

“Siempre nos hemos nutrido de esos puertorriqueños que se van, por las razones que sean, a los Estados Unidos, pero que finalmente quieren regresar a representar a su país. Nadie hubiese querido que se fueran, pero no solo es María, es la situación económica y la pérdida de empleos. Va a ser un periodo largo”, manifestó Rosario.

La líder del olimpismo local estuvo de acuerdo con la noción de que en Estados Unidos tendrán una mayor exposición a deportes que no son tradicionales para Puerto Rico, y cuyas competencias son eventos de envergadura en escuelas superiores y universidades allá como, por ejemplo, la lucha, entre otros.

Agregó que hay que asegurarse de saber cuántos se van y cuántos siguen un carrera deportiva.

Ya se siente el vacío

Mientras, la Federación de Baloncesto de Puerto Rico (FBPR) es una que puede atestiguar que ya es notable la partida de jugadores de sus programas.

“Se han ido ya muchos jugadores. Mi hijo juega categorías menores...

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