Millonarios subsidios que paga la clase media
Por Keila López Alicea
keila.lopez@elnuevodia.com
Y es que la operación de la AEE ya no se limita a un simple proceso de generar y vender energía como lo fue en sus inicios, aseguró su director ejecutivo, el ingeniero Miguel Cordero. Ahora, la corporación pública también es la encargada de pagar contribuciones a los municipios y repartir incentivos al sector privado gracias a legislación impulsada desde la década de 1980.
"Antes el gobierno central era el encargado de dar los subsidios, todo salía del Fondo General. Pero desde los 80 eso se pasó a la AEE. Son cosas que suenan bonitas, pero que las está pagando el pueblo. A veces sale en radio el chisme de que estamos cobrando ilegalmente, pero yo estoy cobrando a base de la ley porque también se tienen que dar estos pagos", sentenció Cordero.
En total, los subsidios e incentivos que reparte la AEE entre una diversidad de clientes le cuesta a los demás abonados $ 300 millones anualmente. Este número está destinado a seguir creciendo, pues Cordero explicó que algunos incentivos aumentan año tras año.
La tajada más grande se la lleva una llamada contribución de impuestos a los municipios que la corporación pública paga en sustitución de los impuestos al erario.
"En esto se paga como $ 200 millones, a los municipios prácticamente se les da el cien por ciento de su consumo. Se supone que esto sea para pagar los servicios como el alumbrado público, pero tengo municipios que, por ejemplo, le pagan la luz a una cancha en una comunidad, cuando yo pienso que si tienen una cancha con luces prendidas es porque pueden pagarla.
También hay otros que tienen un coliseo y que lo alquilan para actividades. Si lo alquilan para una fiesta patronal que dura una semana, eso son miles de dólares que se van en electricidad cuando se debería pagar de lo mismo que genera la fiesta patronal", sostuvo el director ejecutivo.
Asimismo, las leyes creadas para promover el desarrollo del sector privado, como la Ley de Incentivos Industriales, terminan creando otro boquete en la AEE. Este estatuto le cuesta $ 10 millones anuales en subsidios para empresas, mientras que otra ley que subsidia el consumo energético de los hoteles saca $ 6.5 millones del bolsillo de los abonados todos los años.
Mientras, los subsidios que se otorgan a los ancianos, las personas discapacitadas, los residentes de los residenciales públicos y aquellos que dependen de equipo de preservación de vida, entre otros, redundan en poco más de $ 40...
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