Misterio entre risas
Por Tatiana Pérez Rivera
tperez@elnuevodia.com
Miedo y risa debe provocar en la audiencia la historia que presenta la zarzuela "El misterio del castillo", que en coproducción entre la Fundación Puertorriqueña de Zarzuela y Opereta, la Fundación Arturo Somohano y la Orquesta Arturo Somohano, se presentará este sábado y domingo, a las 8:00 p.m. y a las 3:30 p.m. respectivamente, en la Sala de Festivales del Centro de Bellas Artes Luis A. Ferré, en Santurce.
Manuel Méndez Ballester escribió esta pieza que tras su estreno en el 1945 se presentó 111 veces ininterrumpidas en el Teatro Tapia y que ahora Gil René adapta a nuestros tiempos. El maestro Arturo Somohano escribió la música.
Como un "juguete cómico" definió en una ocasión Méndez Ballester este trabajo que en su montaje del 2010 cuenta en su elenco con Herman O'Neill, Cordelia González, Melliangee Pérez, Ernesto Concepción, Joaquín Jarque, Carlos Esteban Fonseca, Junior Álvarez, Ubi Catasús y Juan Pazos. Gil René lo dirige.
La historia, más o menos, va así.
Un hombre entrado en años está intrigado con el mundo del más allá y acude junto a su despampanante esposa a un castillo en el que le aseguran puede hallar respuestas a sus dudas. Quienes allí coinciden, convierten la estadía en una repleta de anécdotas cómicas y escalofriantes.
"Es bien difícil lograr la intriga y el suspenso a la misma vez que te estás riendo", asevera Gil René.
"Además de los personajes principales, el autor sugiere otros de la servidumbre que los transformé, les puse nombre y son ese coro que acompaña a los estelares. Todos los personajes están amparados en que el ser humano puede vivir entre tiempos; ellos hacen que la casa se convierta en una embrujada", añade el director.
Antes, la pieza debía causar miedo. Ahora, lograr ese miedo requiere de efectos que permitan al teatro competir con el cine y la televisión.
"El montaje tendrá efectos especiales sutiles y permitirá experiencias extrasensoriales", promete, "todos los personajes siguen funcionando como concibió el autor, pero hay un doblez en su caracterización y en esos momentos se maneja el miedo. Como también hay que competir con el absurdo cuando no puedes poner una explosión, pones música".
Comisionaron a Francisco Figueroa la creación de una obertura y un preludio al segundo acto de la partitura creada por Somohano y el resultado, a juicio del director, aumenta con creces el impacto.
"Otro elemento importante es que estamos haciendo comedia física y eso es...
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