MMM lava la ropa de sus empleados
Poco después de las 12:00 p.m. de un día cualquiera de diciembre, dos mujeres llevan sus tandas de ropa sucia a una lavandería establecida recientemente por Medicare y Mucho Más (MMM) cerca de su sede en San Juan, para ayudar a los empleados que aún no cuentan en sus hogares con los servicios de agua y electricidad tras el paso del huracán María.
“Utilizo el servicio desde que empezó y es excelente. Es una gran ayuda porque tengo cuatro hijos, vivo en Vega Baja y todavía en mi casa no tengo luz”, expresó Delitza Hernández, quien trabaja en Manejo de Casos de MMM, acerca de la lavandería, que cuenta con diez lavadoras, diez secadoras y cinco empleados temporeros.
Hernández llegó al lugar junto a su colega Arlinne Figueroa, quien se disponía a utilizar el servicio por primera vez. “En mi casa en Toa Baja tengo luz desde noviembre, pero con tantos bajones de luz se dañó la secadora, así que decidí aprovechar la oportunidad para probar el servicio porque los compañeros que lo utilizan tienen muy buenas opiniones de la lavandería”, relató.
Desde que se estableció hace seis semanas, la Lavandería de MMM ha procesado 1,800 tandas de ropa e impactado a 1,300 empleados, informó Orlando González, presidente de la aseguradora.
Contó que la iniciativa es parte del programa MMM te Ayuda, que ha provisto distintos tipos de ayuda al personal después de que el embate del huracán María en septiembre pasado provocó el colapso de los sistemas de energía eléctrica y telecomunicaciones, entre otros daños.
“Una de las necesidades grandes que identificamos era la parte del lavado de su ropa. Como los empleados no tienen luz, no pueden lavar ni secar. Los ‘laundries’ tampoco tenían luz, así que surgió la idea de atender esa necesidad y creamos esta facilidad, con capacidad para manejar unas 100 tandas al día”, relató el ejecutivo.
“La idea es brindar un servicio completo que incluye lavado, secado y doblado”, resaltó González. Como funciona es que los trabajadores llevan la ropa en una bolsa y regresan a sus labores. Luego, los empleados de la lavandería lavan, secan y doblan la ropa, la empacan en bolsas y avisan a su dueño para que la pase a recoger.
“En el caso de nuestras oficinas regionales, personal que no está cerca del área metropolitana puede llevar su tanda de ropa a la oficina y hay una ruta de la compañía que la recoge y la trae aquí a la lavandería, donde se lava, se seca, se dobla y se devuelve al otro día a la oficina regional”, agregó sobre el...
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