La monja y el escritor de culto
Por Tatiana Pérez Rivera
tperez@elnuevodia.com
Luego de una extensa trayectoria como periodista, por fin Velázquez puede escribir libremente las historias que inventa. Esta se centra en una monja. Y la monja se enamora.
"Ella es una mujer de muchas facetas. Está en medio de su vida, hay una historia anterior y otra posterior a esta. Me eché poco más de dos semanas en escribir esta novela corta con la computadora en la falda. Me fui a ese mundo de principios de siglo XX en Puerto Rico sin radio, con cigarros, y me imaginé cómo era la gente", narra desde su casa en Arecibo.
La gente en el 1920 terminó siendo "igual que la de ahora". "La misma putería pero con la falda más larga y los pantalones almidonados", afirma soltando una carcajada y con la autoridad que le dan sus 63 años.
La religiosa que lleva la rienda de su texto tiene 23 años y se llama Emilia Leclerc. Abandona el convento de las Clarisas Descalzas en busca de una amante, Violeta, y en el camino se topa con un amante, Antonio, un revisor de formatos y tipografía de la imprenta Casa Didot, en Arecibo. Posee los elementos ideales para una pieza erótica.
"Me dio con la monja", acepta, "con ese mundo secreto, con las horas de las laudes. Mi formación fue en un colegio de monjas con hábitos almidonados, sé lo que es eso".
Antes del convento, el Viejo San Juan albergó a Emilia.
"Solo lleva un año en el convento", dice, "en el Viejo San Juan tuvo una experiencia que la marcó y vivió amores tormentosos. Antes, con la ruptura, las mujeres se metían en un convento o se envenenaban, ahora se van al (Hospital San Juan) Capestrano".
La época la recreó a fuerza de mucha lectura y apreciación de la arquitectura en las ciudades de la época.
"Algunos edificios me los inventé y el resto de la historia es imaginación. ¿Qué podía pasar entre un hombre y una mujer sanos y hermosos?", cuestiona sobre los protagonistas de la novela corta que ha viajado largo.
"¿Tiene la novela de la monja?". Desde que la casa editora La secta de los perros publicó la historia corta en un formato muy sencillo, se ha requerido su reimpresión en pequeñas cantidades. El texto se ha vendido en las librerías de Río Piedras y en el portal cibernético de Amazon.
"Yo había escrito un cuentito de amor de lo más aquel y lo había publicado en Claridad en el 2008 o 2009. Era entre un encuadernador y una muchachita con...
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