NC***Con emociones encontradas jefes de agencias federales que dejarán la Isla
NC***Con emociones encontradas jefes de agencias federales que dejarán la Isla
Mariana Cobián
mariana.cobian@gfrmedia.com
Tres puertorriqueños que dirigen al presente importantes oficinas federales en Puerto Rico cesarán próximamente en esos puestos y serán reubicados en otras funciones fuera de la Isla, por lo que viven sentimientos encontrados ante esos nuevos retos profesionales.
El jefe del Negociado Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), Carlos Cases; el agente especial a cargo de la Oficina de Seguridad Interna del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE-HSI), Ángel Meléndez; y el director del Negociado de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF), Félix Ríos, conversaron con este medio sobre las transiciones que deben asumir a corto plazo.
Cases confirmó que será subdirector de la Oficina de Asuntos Internacionales del FBI en Washington D.C. El funcionario precisó que ayer, miércoles, recibió la llamada del director del FBI para indicarle que ocupará dicha posición.
"Es un reto. Es una oficina sumamente importante dentro del FBI. Hay oficinas de la agencia en sobre 70 países en el mundo y otras satélites ubicadas en las embajadas americanas y en los consulados. Velaré por sus funciones administrativas y operacionales de las oficinas internacionales. Es un programa sumamente importante porque las investigaciones tienen nexos internacionales como terrorismo y crimen organizado", detalló Cases.
Como parte del proceso, tiene 90 días para reportarse a su nuevo rol, pero aún no le ha llegado la orden oficial, por lo que desconoce cuándo exactamente partirá a Estados Unidos.
"Todavía no he tenido la oportunidad de procesarlo. Pero no es la primera vez que me trasladan. Éste sería mi noveno traslado en 24 años de carrera, pero soy boricua y ésta es mi casa. Siempre es difícil cuando uno se va de su tierra", expresó Cases.
En cuanto a su familia, dijo que ya "están acostumbrados" y que sus hijos, ambos adolescentes, se pusieron contentos. De hecho, cada vez que se han mudado en una de "nuestras aventuras", a los dos o tres años de estar en el lugar comienzan a preguntar cuándo se van.
"Voy a seguir mi vida normal. Ahora hay otras presiones, como el proceso de mudanza, buscar dónde vivir, empaparme de las funciones de la oficina nueva. Voy a extrañar el trabajo, los casos que tenemos que son fantásticos, la gente de la oficina, el equipo de trabajo, los agentes y subdirectores, los...
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