NC***Emotiva graduación de jóvenes del Negociado de Instituciones Juveniles
NC***Emotiva graduación de jóvenes del Negociado de Instituciones Juveniles
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Alex Figueroa Cancel
alex.figueroa@gfrmedia.com
"Este es el mejor momento de mi vida".
Con estas palabras y con los ojos llorosos por el recuerdo de instancias no tan alegres, Margarita manifestó sus emociones al ser una de 71 jóvenes del Negociado de Instituciones Juveniles que hoy se graduaron de sexto, noveno y duodécimo grado en una emotiva ceremonia que se realizó en el Cuartel de Ballajá, en el Viejo San Juan.
"Fui desertora escolar. Cortaba clases. Nunca entraba a la escuela. Me colgaba", expresó Margarita, nombre ficticio para proteger su identidad por ser menor de edad que cumple una sentencia del tribunal.
"Sin embargo, cuando llegué a Instituciones Juveniles en Bayamón, pues todo empezó desde ahí. Empecé a mostrar interés en las clases, empecé a sacar buenas notasâ¦", agregó mientras dejaba de contener las lágrimas y asomaba una enorme sonrisa".
La joven no sólo asistió a los actos de graduación, sino que además formó parte de una presentación musical de un coro, en el que ingresó como parte de varias clases de canto y teatro que obtuvo a través del Instituto FILIUS, que consiste de un acuerdo colaborativo entre el Departamento de Corrección y Rehabilitación (DCR) y la Universidad de Puerto Rico.
"El equipo de trabajo en Bayamón es buenísimo. Eso no es una cárcel. Es un centro de rehabilitación y eso para mí es mi casa. No me siento preparada para salir todavía, pero con el pasar del tiempo, mira los logros que he tenido", expuso la joven, quien ahora espera comenzar clases en Trabajo Social.
"¡Llegué a mi cuarto año! Tuve una graduación hermosa, mi familia está bien orgullosa de mí y estoy orgullosa de mis compañeras y de mí", añadió.
Por su parte, David - también nombre ficticio - señaló que jamás se hubiera graduado de haber seguido la trayectoria que llevaba antes de llegar a las Instituciones Juveniles.
"He logrado un fruto grande aquí porque en la calle no lo podía terminar, por cuestión de drogas y amistades no adecuadas", sostuvo.
"En la escuela cortaba clases, no respetaba a nadie, siempre creía que me las sabía todas y lo estaba haciendo mal", abundó.
Ahora se siente satisfecho al ver los resultados de lo que es capaz.
"No se me hizo difícil (las clases), pero no es fácil porque es una lucha en sí. Estoy agradecido de los maestros, que me ayudaron a completar el cuarto año"...
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