Nueva vida a base militar
CIUDAD DE PANAMÁ.- Los muros de cemento que flanquean la entrada principal dan cuenta de lo que en un momento fue una impenetrable barrera, una verja que los ciudadanos de la capital de Panamá no podían cruzar. Hoy, pintadas de blanco y un vibrante azul, los muros dan la bienvenida a todos los que deseen descubrir cómo una antigua base militar se puede transformar en un centro de académico, empresarial y de innovación de primer nivel.
Ciudad del Saber es el nombre con el que se ha bautizado el sector que hace más de una década era la base militar Clayton. A pasos de la esclusa de Miraflores del Canal de Panamá -el acceso a través de océano Pacífico-, esta zona fue una vez la sede del Comando Sur del Ejército de los Estados Unidos y escenario de uno de los eventos que dio pie a que, en 1977, se firmaran los tratados que permitieron el traspaso de terrenos militares a manos del gobierno de Panamá.
Pero, desde principios de siglo, la zona que hoy se conoce como Ciudad del Saber se ha ido transformando a tono con un Plan Maestro que apuesta al desarrollo empresarial y tecnológico como punta de lanza para redesarrollar las 120 hectáreas que comprenden la antigua base Clayton, aseguró el presidente de la Fundación de Ciudad del Saber, Jorge Arosemena.
“El proyecto de la Ciudad del Saber es un proyecto que ya lleva 20 años, en donde creo que es un modelo exitoso de reconversión de una base militar en un centro académico regional de excelencia en donde ya hay organismos internacionales, centros de capacitación, incubadoras de empresas, universidades...”, indicó el alcalde de la Ciudad de Panamá, José I. Blandón Figueroa.
Es un espejo en el que Puerto Rico se puede reflejar, pues la historia de la base militar Clayton es similar a las antiguas bases puertorriqueñas, como Ramey, en Aguadilla, Roosevelt Roads, en Ceiba, y las tierras bajo control de la Marina en Vieques y Culebra.
Los esfuerzos por crear un centro de innovación en terrenos dentro de Panamá que estaban en poder de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos comenzaron a mediados de la década de 1990. En 1995 quedó constituida legalmente la Fundación de Ciudad del Saber, mientas que en 1997 abrió su primera oficina “con tres personas”, relató Arosemena.
“De más está decir que todo el mundo pensó que habíamos perdido la razón, porque esto nunca iba a suceder. La primera oficina la abrimos en el 97 esas tres personas. Aquí llegamos un 2 de diciembre de 1999 once personas, sin presupuesto y...
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