EL PAÍS DE LOS TEMPLOS DORADOS

De Bangkok a Chiang Mai

Es que Bangkok es un importante centro político y económico del sudeste asiático atravesado por el río Chao Phraya, lindo oasis para recorrer en ferry y huir del tráfico y cemento. En el pasado era conocida como la "Venecia de Oriente" por su vasta red de canales pero el rápido crecimiento en la segunda mitad del siglo XX hizo que fueran reemplazados por transportes terrestres como los tuk tuk que hoy dominan las calles.

Estas motos con carroza acoplada para pasajeros suelen ser extravagantes por su colorida decoración. Atención: suele ser arduo y complicado librarse de los conductores que acosan al turista para que se suba. Es una buena y rápida opción para trayectos cortos, no apta para temerosos ya que estos ágiles vehículos se meten por donde sea como si fueran simples motos.

Antes de subir regatee con actitud, sino pagará varias veces el precio real.

Desde que se pone un pie en Tailandia la imagen del rey Bhumibol Adulyadej está siempre presente en toda la ciudad. Soberano desde 1946, es el jefe de Estado que más tiempo lleva en el cargo en el mundo. Una visita obligada es al Palacio Real, bello complejo de edificios y residencia de monarcas desde el siglo XVIII hasta mediados del XX.

En el palacio está el Wat Phra Kaen, el templo budista más importante y sagrado del país, con el Buda Esmeralda, principal icono religioso tailandés. Casi el 95% de los tailandeses son budistas de la tradición theravada. La representación, de 45 centímetros de alto, está hecha en jade verde y adornada con ropajes de oro que sólo el rey toca cuando hay cambio de estación. Los fieles desfilan incesantemente y toman la sagrada flor de loto antes de entrar para rezar y saludar a Buda.

Del Palacio Real ve al Buda Reclinado en el Wat Pho, el templo más grande y antiguo de Bangkok. El Rey Rama III mandó a construir esta impresionante figura dorada de 46 metros de largo, con una cara de 15 metros y pies de tres metros de alto por cinco de largo. Al entrar el visitante se topa con una enorme cabeza, tan grande que el Buda parece no caber en el salón. La figura es de estuco laminado en oro y los pies son una joyita donde se ilustra el paso de Buda al nirvana con bellísimas incrustaciones de madreperla.

Lo que más llama la atención del extranjero en Asia es el intenso uso de la calle. Bangkok no es excepción. En Siam Square hay muchos centros comerciales y "shoppings callejeros" con una extraordinaria gama de productos.

En Khao San, la gran...

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