PeRdón, ya no se escucha

Por KB

Primero, deben tener en cuenta que antes no existían los teléfonos celulares. Así es. Partiendo de ese insoportable escenario, entenderán entonces que éstos eran imprescindibles para la vida cotidiana de cualquier ciudadano. ¡Están ante un teléfono comunal!

Con él se resolvían o se causaban problemas, nacían amores o se desbarataban, se resolvían emergencias o hasta se provocaban. "¿Qué tú dices? ¿Cómo? ¿A quién?", todavía recuerdo escuchar esas frases a viva voz en la calle. Disculpen el abrupto cambio en mi tono de voz.

También causaba cosas graciosas: personas que casi se tragaban su bocina con tal de que nadie escuchara el derroche de labia o usuarios que esperaban frente a un teléfono público con la esperanza de que éste sonara ya que habían ofrecido el número como si fuera privado. ¡Qué tiempos! Mentir era más...

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