Personas sin hogar imploran un techo

Por Sandra Caquías Cruz

scaquias@elnuevodia.com

Palmisano tiene 40 años y hace 14 años deambula por las calles de San Juan. "Estoy en la calle", dijo con su cabeza casi rapada y los labios pintados de un rojo brillante. "Ya me salí del vicio", confesó mientras mostraba documentos, una sábana y otras pertenencias que carga en su bolsa para usar donde la sorprenda la noche.

"Yo lo que quiero es que me den una casa por Sección 8", fue la petición que Palmisano tenía para el gobernador Luis Fortuño, quien ayer, junto a su familia, sirvió almuerzos a decenas de personas sin hogar que llegaron a La Fondita de Jesús. Palmisano solo se acercó al gobernador para que una voluntaria la fotografiara.

Pero la falta de vivienda no fue el único reclamo de los participantes de este centro de servicios. Danny Delgado aprovechó el momento en que Fortuño le puso el plato en la mesa para pedirle "que se concentre en la gente pobre y que no tiene empleos, que eso es una prioridad grandísima. Por eso es que está pasando tanta violencia, porque hay mucho desempleo", señaló cuando la prensa se le acercó.

"Trajimos un equipo de trabajo para conocer los problemas que tienen algunos de ellos y poderlos atender", dijo Fortuño a preguntas sobre las necesidades que esbozaban los deambulantes. "Nos llevamos las manos llenas para atenderlos"...

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