PIERDA PESO, NO SU TIEMPO O DINERO

Por Andrea Martínez

amartinez@elnuevodia.com

Ante la euforia que ocurre en el mes de enero con las resoluciones para perder peso, y los miles de dólares que algunos gastan en este empeño, los expertos advierten que los consumidores deben hacer una evaluación ponderada de sus hábitos personales y su presupuesto, antes de correr a gastar grandes sumas en membresías de gimnasios o en la compra de equipos o suplementos.

Yaritza Yulián, de los gimnasios Zona Activa, señaló que lo más importante es que el consumidor cambie su estilo de vida y convierta el ejercicio en parte integral de su vida diaria.

"El ejercicio provee un sinnúmero de beneficios, al igual que comer saludable", destacó Yulián.

Por otra parte, el Departamento de Asuntos del Consumidor (DACO) ha sido enfático en la importancia de estudiar con cuidado los contratos de membresía que se firman en los gimnasios. Precisamente, para evitar el problema que más querellas provocaba -el de las renovaciones de contrato automáticas-, se enmendó el Reglamento contra Prácticas y Anuncios Engañosos del DACO.

Actualmente, se prohíben las renovaciones automáticas de contratos, a menos que medie un consentimiento expreso del consumidor.

La autora del libro "Pierde peso y gana salud", la nutricionista Vilma Calderón, afirmó que la inversión más sabia es visitar un nutricionista licenciado, para que le diseñe a la persona un plan de alimentación para perder peso, según su edad, sexo y condición médica.

Calderón subrayó que muchos planes médicos cubren estas visitas y, en ocasiones, el paciente puede solicitar un reembolso por el gasto incurrido, si el plan no tiene en su lista de proveedores al nutricionista escogido. Dijo que una visita inicial a un nutricionista podría tener un costo de entre $ 60 y $ 90.

Entre las sugerencias de Calderón a los consumidores que buscan ponerse en forma después de los excesos de la pasada temporada festiva, está evitar salir corriendo a comprar pastillas o suplementos para rebajar.

"La mayoría son fraudulentos y sus reclamos ni están aprobados ni validados", indicó.

Agregó que la mayoría de estos suplementos tienen efectos secundarios negativos, como sería aumentar la presión arterial o el ritmo cardíaco.

"En esta euforia que ocurre en el mes de enero con la resolución de perder peso, lo que yo recomiendo es un ejercicio de introspección", sugirió Calderón. Aconsejó que cada persona analice cuántas veces ha hecho la misma resolución sin éxito. Se ha comprobado...

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