Plagada de politización la AEE

Por Gerardo E. Alvarado León

galvarado@elnuevodia.com

El endoso vino nada más y nada menos que de la oficina del entonces gobernador Rafael Hernández Colón, por lo que consiguió el trabajo sin dificultades.

Empero, "Carlos" hubiera preferido competir "de tú a tú" con otros aspirantes, "pero tuve que hacer lo que no quería: conseguir la carta de recomendación de un político porque si no es de esa forma, nadie entra ahí".

"Mi solicitud de personal elegible estaba activa y había pasado los exámenes, pero estaban durmiendo el sueño de los justos. A mí me pasó en 1988, pero lo que ocurre en la actualidad no es muy distinto", afirma.

La situación de "Carlos", nombre falso a petición del entrevistado, es solo una de las múltiples manifestaciones de la alta politización o partidismo en las agencias y corporaciones públicas, un mal que trastoca desde los nombramientos de personal hasta las decisiones administrativas.

En el caso de la AEE, la politización también tiene implicaciones en el servicio al cliente y el costo de la electricidad pues, en ocasiones, desemboca en demandas que al final del día son pagadas por los ciudadanos a través de la factura de luz.

"Carlos" conoce bien este último asunto, ya que en dos ocasiones ha demandado a la AEE por "acoso laboral y persecución política".

El pasado 6 de noviembre, dos empleados también demandaron a la AEE alegando persecución política y violación de derechos civiles. Estos empleados, que fueron despedidos por supuestamente robarle tiempo a la AEE, sostienen que "su único pecado" es ser del Partido Nuevo Progresista (PNP).

"El asunto con las demandas es que son una gran trampa porque las termina pagando el pueblo. No tengo duda de que las demandas sean idea de los mismos partidos políticos para favorecer a sus bufetes de abogados con los litigios", comenta "Carlos".

Y es que, al parecer, en la AEE todo se mira a través del color del cristal de la politiquería. Tal es el punto que los empleados -en su mayoría- están divididos en dos grandes bandos: Energéticos Estadistas y Energía Popular. El primero congrega a los servidores afiliados al PNP y el segundo, a los del Partido Popular Democrático (PPD).

Aunque la Ley de Ética Gubernamental (Ley 1-2012), la Ley para la Fiscalización del Financiamiento de Campañas Políticas (Ley 23-2011) y las políticas internas de la AEE prohíben la participación, durante horas laborables, de servidores públicos en actividades que promuevan los intereses de cualquier...

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