Power y los próceres olvidados

GABRIEL LABORDE

ESTUDIANTE DE DERECHO DE LA UPR

Si no fuese porque la actividad logró que, a través de críticas positivas y negativas, se hable sobre quién fue, muchos seguirían desconociendo su relevancia y lo que hizo. La vida e historia de Ramón Power es algo que todo puertorriqueño debería conocer. De los primeros que con orgullo se llamó a sí mismo puertorriqueño, capitán del ejército español, representante con voz y voto de los puertorriqueños en las Cortes de Cádiz y encima vicepresidente de ese cuerpo, en donde promovió legislación para impulsar el desarrollo económico de la Isla de Puerto Rico. Sin embargo, muchos desconocían eso hasta hace unos días, y algunos todavía lo desconocen.

Pero eso no sólo ocurre con Ramón Power; pasa con muchos otros próceres puertorriqueños. Celebramos su vida y obra a través de reconocimientos que nada hacen por dar a conocer su legado y su trabajo. ¿De qué vale nombrar calles en honor a José de Diego si no se da a conocer quién fue? ¿Qué importa que haya escuelas con el nombre de Ramón Baldorioty de Castro si no enseñamos qué hizo? ¿Para qué damos como feriado el natalicio de Eugenio María de Hostos si no educamos bien sobre su obra?

Ésos y muchos otros...

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