Preciado botín

Por Luis Santiago Arce

larce@elnuevodia.com

Una monumental explosión ofensiva en el tercer periodo, encabezada por tres bombazos de Ricardo 'Ricky' Meléndez a finales del tercer parcial, guió anoche a los Piratas de Quebradillas a un abierto triunfo 89-72 sobre los Leones de Ponce para ganar su primer campeonato en el Baloncesto Superior Nacional (BSN) desde la seguidilla de tres títulos de 1977 a 1979.

Para Quebradillas, que ganó sus ocho partidos locales de la postemporada y dominó la serie final en seis partidos (4-2), es el quinto título en la historia de la franquicia, y Ponce, que regresó este año a la liga tras par de temporadas en receso, sigue sin ganar desde el 2004.

Kevin Lisch, quien volvió a ser el motor del ataque pirata, cerró con un partido enorme, al marcar 20 puntos, con nueve rebotes y cinco asistencias, para ser escogido Jugador Más Valioso de la serie.

"Se siente bien, pero lo mejor ha sido ver la cara de toda esta gente. Hay lágrimas de alegría y nada puede ganarle a eso", dijo Lisch en medio de la frenética celebración.

David Huertas aportó 16 puntos, seguido por 15 de Lorenzo Mata y 14 de Meléndez, cuya aoprtación fue clave en una segunda mitad que dominó Quebradillas 48-27 ante una delirante concurrencia en su exteremadamente abarrotado Coliseo Raymond Dalmau.

Carlos Emory, en causa perdida, marcó 17 tantos, junto a 16 tantos y 13 rebotes de Mike Harris. Fueron los únicos de Ponce en doble cifra. Ike Diogu, quien tuvo limitada participación por problemas de faltas personales desde temprano en el desafío, apenas sumó ocho puntos.

"Me siento muy contento porque Dios nunca me dejó en vergüenza... no porque ganamos, sino porque el caminar día a día de esta franquicia este año fue edificante para mí", comentó el dirigente de los Piratas, Carlos Calcaño.

Mientras que Huertas expresó que "no hay palabras para describir los sentimientos que tengo ahora mismo, lo bien que me siento por mí, por mis compañeros y por esta fanaticada que nos acompañó toda la temporada".

Ponce, inspirado por su dramático triunfo local del juego anterior 95-92 en tiempo extra, entró a cancha con la mira afinada, logrando cuatro triples en el periodo inicial que dominaron por el mínimo, 23-22, aunque Diogu tuvo que ir al banco con dos rápidas faltas personales faltando 5:44.

Para el segundo cuarto, los Leones abrieron con par de canastos del suplente Gabriel Pirulo' Colón, quien pareció contagiar con su energía en defensa a sus compañeros.

Ponce...

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