Preocupación por la sequía
CAYEY.- Familias de pueblos afectados por la falta de lluvia en la zona central han comenzado a sentir los efectos de la sequía y el tiempo anormalmente seco, por lo que toman medidas para hacerle frente en caso de que pueda prolongarse.
De acuerdo con el Monitor de Sequía de Estados Unidos, ya suman 258,187 las personas afectadas por la sequía moderada que se vive en sectores de al menos 11 pueblos, entre ellos el este de Santa Isabel, una porción del oeste de Yabucoa, Salinas, Guayama, Arroyo, Patillas, Cayey, San Lorenzo, Caguas, Gurabo y Aguas Buenas.
Pero, además, más de la mitad este de la Isla enfrenta condiciones anormalmente secas. Por ello, la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) se propone iniciar oficialmente un plan de racionamiento.
“Me preocupa porque no sabemos cuánto pueda durar la sequía. Hay que hacer provisión ahorrando agua, estando consciente de lo que se está haciendo con el agua, si se está gastando de más”, afirmó Francisco Marrero, residente de Cidra que ayer, Día de las Madres, llegó a uno de los pocos establecimientos comerciales que había abiertos en Cayey acompañado de su familia.
La sequía ha sido tema de conversación para ellos, según contaron, porque hasta en Cidra notan los árboles y la tierra secos.
“¡Ay bendito, los palos (están) bien secos y la tierra! Y yo me paso echándole agua a las plantas mías, pero con los galoncitos, que yo no uso la manguera. No, no la uso porque me da como pena. Y todos los días uno se levanta con la esperanza de que llueva porque se ve como si fuera a llover, pero lo que llueve es poquito, tan poquito que ni se moja la tierra. ¡No se moja!”, describió Norma Colón, esposa de Marrero.
La mujer lamentó que no todo el mundo parece estar tan al tanto.
“A mí me preocupa que aunque estamos así, en sequía, a la gente como que no le importa y siguen lavando marquesinas y como malgastando el agua, en vez de pasar el mapito o por lo menos echarle poquita (agua). Como que no toman conciencia de eso, siguen malgastándola como si hubiese mucha y ya de verdad por la pluma no está bajando tanta”, apuntó.
Precisamente sobre eso conversaban con su hija poco antes de que El Nuevo Día los encontrara.
“Le comentaba que ayer estaba pasando por una represa (en Caguas) y vi que estaba seca completamente y me preocupó” sostuvo la joven Whidney Marrero Colón.
“Es preocupante porque a pesar de que estamos rodeados de agua, pienso que se está haciendo mal uso del agua, la están usando en cosas...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba