Sin presupuesto no hay Título III
La directora ejecutiva de la Junta de Supervisión Fiscal (JSF), Natalie Jaresko, se mostró optimista en que el gobierno de Ricardo Rosselló Nevares corregirá las deficiencias en el presupuesto recomendado sin que haya necesidad de acudir a los tribunales.
Al explicar las razones del organismo federal para rechazar el presupuesto de Rosselló Nevares el pasado jueves, Jaresko subrayó que hacer las correcciones al programa de gastos y recaudos, al igual que implementar la totalidad de las reformas contenidas en el plan fiscal, es necesario para encausar la economía de la isla y para promover la transparencia y la rendición de cuentas en el uso de los fondos públicos.
Pero también, dijo Jaresko, aprobar un presupuesto cónsono con el nuevo plan fiscal certificado es crítico para lograr la renegociación de la deuda de la isla. Y para lograr ese objetivo, si el gobierno de Rosselló Nevares no hace su parte, Jaresko aseguró que la JSF procederá con lo establecido en Promesa.
“El plan fiscal no es un menú del que puedas escoger”, dijo Jaresko en una conferencia de prensa para hablar de las deficiencias que la JSF encontró en el borrador del presupuesto recomendado para el siguiente año fiscal.
Deficiencias
En síntesis, según la JSF, lo propuesto no refleja lo establecido en el plan fiscal y en el caso del Fondo General, el presupuesto recomendado supone unos $200 millones en gastos por encima de la proyección de ingresos certificada. Mientras, la información provista por el gobierno no incluye el presupuesto de las corporaciones públicas o dependencias similares, por lo que, según Jaresko, la JSF tiene ante sí un borrador de presupuesto que deja fuera el 60% del gasto público.
En el caso de los fondos para que miembros de la Policía coticen al Seguro Social, Jaresko explicó que la JSF comparte esa misma aspiración, pero esa iniciativa debe comenzar a partir del año fiscal 2020.
“Estos son cambios medibles al presupuesto y a la forma en que Puerto Rico gasta el dinero y levanta recaudos”, agregó Jaresko, al indicar que Puerto Rico merece tener indicadores que permitan a la JSF, pero también a la ciudadanía, pasar juicio y determinar si el gobierno progresa en términos fiscales.
El lunes pasado, El Nuevo Día adelantó que el presupuesto que presentó el gobernador excedía las proyecciones certificadas, implicaba aumentos en algunas agencias como la Oficina del Gobernador y no detallaba los fondos federales que se reciben para fines operacionales.
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