Programa para identificar demencia

¿Qué hacen los encargados de los centros de actividades para adultos mayores cuando un participante muestra síntomas de demencia?

Muchas veces, nada, porque no tienen las herramientas para identificar o intervenir adecuadamente con el problema.

“En el centro, si un viejo comienza a manifestar una conducta poco sociable, de no seguir instrucciones o generar choques con los demás participantes, lo mandan a la casa y le envían el almuerzo y quizás lo visitan una vez al mes. ¿Qué va a pasar con ese viejo? A veces, después lo encuentras viviendo en condiciones infrahumanas. Recuerdo un caso en Villa Palmeras, que la persona vivía en esas condiciones, pero un centro le llevaba almuerzo todos los días. ¿Y ese chofer no se daba cuenta?”, ilustra Concepción Silva, exprocuradora de las Personas de Edad Avanzada.

Para atender esa situación, Silva desarrolló un programa de capacitación para profesionales que atienden adultos mayores en los centros (de envejecientes), en otras instituciones y en la comunidad. El Programa individualizado para personas con Alzheimer y demencias relacionadas (PIPAD) ofrece orientación con módulos educativos de diversos temas, pero también tiene formularios para identificar adecuadamente la situación y hacer un diagnóstico informal. Asimismo, se crearon protocolos que indican claramente qué hacer en caso de personas que están diagnosticadas con demencia y con las que no lo están. El programa se desarrolló en la organización Servicios Sociales Luteranos de Puerto Rico (SSLPR), donde colabora Silva, y en el cual también trabaja la psicóloga clínica Lymarie Ramos López.

Ya han capacitado médicos y directores de programas en organizaciones y programas, y “el grupo grande que nos queda son los directores de los 131 centros de cuidado diurno que hay en Puerto Rico. Allí capacitaremos al director, al trabajador social, a la enfermera y al coordinador de actividades. Yo creo que el primero que tiene que estar adiestrado es el chofer, que es quien busca a esa persona a la casa o le lleva almuerzo”, explica Silva sobre el acuerdo de colaboración con la Oficina de la Procuradora de las Personas de Edad Avanzada (OPPEA).

¿Por qué los centros de actividades?, le pregunto.

“Porque siempre los visualicé como ese lugar donde toda la comunidad sabe que existen los recursos y la información esencial para trabajar con el proceso de envejecimiento y con el familiar dentro de ese proceso. Lo que queremos dejar es la capacidad de establecer un...

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