Puerto Rico: se une o se hunde

La semana que está a punto de terminar ha sido intensa pero también histórica. Quizás por la vorágine de eventos, tanto locales como del exterior, perdemos perspectiva de las cosas realmente importantes que ocurren y que nos afectan.Esta semana, se hizo público que el total de dinero que la isla recibirá a causa del huracán María ascenderá a $82,086 millones. La última versión del Plan Fiscal, con sus debilidades y fortalezas, delinea la ruta a seguir para asegurar que la bonanza económica que ya está experimentando la economía no sea temporera. Según las proyecciones de crecimiento económico preparadas por la Junta de Supervisión Fiscal (JSF), para el período del 2019 hasta el año fiscal 2022 habrá un crecimiento agregado de 18.7%.De materializarse las reformas estructurales, este crecimiento en principio compensaría el 14% de contracción agregada que ha tenido la economía entre el 2006 y el 2018. En arroz y habichuelas, tenemos la gran oportunidad histórica de reconstruir la economía, la infraestructura y rehabilitar la competitividad económica, que es lo que nos garantizará el crecimiento a largo plazo.Sin embargo, las posibilidades de revertir la espiral de contracción económica en la que llevamos desde el 2006 están directamente vinculadas a nuestra capacidad de implementar reformas. Muchas de estas reformas van a ser dolorosas y costosas, que requerirán un gran nivel de sacrificio y madurez por parte de todo el mundo.Las reformas estructuralesLas llamadas reformas estructurales a las que la JSF, los economistas y otras voces del país hacen referencia, no son otra cosa que las transformaciones al modelo gubernamental y el marco institucional que ya han dejado de ser viables. La gran cantidad de fondos federales que va a recibir Puerto Rico ha creado un sentido de comodidad en diversos sectores, particularmente la clase política. Es obvio que las reformas que el país necesita, aún con la inyección de dinero, van a crear malestar en la población y no son simpáticas.De ahí el miedo de la clase política en implementarlas, el desafío directo a la JSF, y el uso del populismo como propaganda para demonizar las transformaciones que garantizarán la viabilidad económica a largo plazo de Puerto Rico. Es penoso que luego de doce años de depresión, de ver la quiebra gubernamental, de ver partir miles de hermanos a otras tierras, del golpe mortal de un huracán, de angustias y sufrimientos, aún no exista la voluntad de transformar al país.Encaminadas...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR