¡Pura tiraera!
Por José A. Sánchez Fournier
jose.sanchez@elnuevodia.com
Ambos dirigentes se ven las caras en la actual final del Baloncesto Superior Nacional (BSN), en la que también libran la riña profesional que existe entre ambos.
Ya, de paso, Rosario domina la misma 1-0 luego que el domingo en la noche sus Capitanes de Arecibo vencieran a los Piratas de Quebradillas 89-81 en el primer choque de la final.
La riña entre ambos comenzó luego que Bruton reemplazara a Manolo Cintrón como dirigente de Quebradillas durante su serie de cuartos de final contra los Atléticos de San Germán.
Bruton tomó las riendas cuando los Piratas estaban empatados 2-2 con los Atléticos, tras perder 95-90 el cuarto juego en el coliseo Raymond Dalmau. Bajo la dirección de Bruton, Quebradillas ganó los siguientes dos desafíos y adelantó a la semifinal. Allí se midieron a los Vaqueros de Bayamón, dirigidos por el máximo dirigente ganador del BSN, Julio Toro.
Rosario, dirigente de Arecibo, dijo públicamente que deseaba que Toro y los Vaqueros vencieran a Bruton y a los Piratas, para reivindicar al despedido Cintrón.
Quebradillas superó en seis partidos a Bayamón y ahora juega en el baile de coronación frente a los campeones defensores. Y Bruton está consciente de que Rosario fue uno de sus primeros detractores en ese aspecto.
"Escuché sobre sus comentarios", admitió Bruton hace unos días.
"Primero que todo, ocho personas tuvieron la oportunidad de dirigir este equipo (tras el despido de Cintrón)", indicó Bruton, quien fue contratado luego de que se discutiera abiertamente la posibilidad de que técnicos boricuas como Leo Arill y Carlos Mario Rivera fueran escogidos para el puesto.
"Pero todos querían una garantía de dirigir el año próximo. Todos dijeron que no, no aceptaron el reto", dijo.
"Así que al decir eso (Rosario), primero debería pensar sus palabras antes de decirlas", agregó Bruton, en torno a los comentarios de Rosario.
"No le estoy faltando el respeto cuando digo eso. Pero él no conocía la situación completa, solo sabía un lado de la historia. Yo soy el otro lado de esa historia".
Bruton, quien bajo la dirección de Cintrón fue despedido como refuerzo de Quebradillas poco antes de su contratación como reemplazo del dirigente, subrayó que él no tuvo que ver con el sonado despido de su predecesor.
"Tengo que decir que lo que le pasó a Manolo no fue a causa mía. Yo no busqué que lo despidieran", dijo el técnico estadounidense-australiano.
"La fanaticada quería eso por mucho...
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