Sin reclamar en el ICF la osamenta insepulta
Por Daniel Rivera Vargas
end.drivera2@elnuevodia.com
Ayer, tanto el Departamento de la Familia como la Policía de Carolina indicaron que han recibido información de que una hermana del fallecido, identificado como Marco Rosa Cruz, habría sometido una querella ante la agencia exigiendo que la viuda, Josefa Rodríguez, le permitiera ver a su hermano, ignorando ella que había muerto.
Limary Vélez, portavoz de Familia, dijo que hoy esperan cotejar en la oficina local de Carolina si, efectivamente, esa querella se radicó.
A 24 horas de que, notificados por una vecina, las autoridades llegaran a su casa y descubrieran la osamenta en una cama, la familia del hombre todavía ayer no había reclamado su cuerpo al Instituto de Ciencias Forenses (ICF).
Patricia Vélez, portavoz del ICF, dijo que la personas autorizadas en ley para identificar al fallecido de 75 años eran su viuda Josefa Rodríguez, también de 75, y sus hijos, pero ayer ninguno de estos compareció a la sede de la dependencia en Río Piedras.
Vélez también dijo que el ICF tardará al menos varias semanas en preparar los resultados de los exámenes que se le han realizado al cuerpo para determinar de forma oficial la causa de muerte del hombre que padecía diferentes condiciones de salud.
La sargento Karen González, del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Carolina, dijo que la fiscal Judithmar Pérez determinaría qué cargos -si alguno- proceden en este caso, dependiendo del resultado de los exámenes del ICF.
González dijo que en todo caso se trataría de un delito menos grave. El artículo 129 del Código Penal dispone que incurre en delito menos grave "toda persona que... interrumpa un funeral". Conforme al artículo 16, la pena por esos delitos no son mayores de seis meses de cárcel y multa de $5,000.
Según las autoridades, Rosa Cruz apareció muerto el sábado en su residencia en la urbanización Villa Fontana de Carolina tras recibirse una llamada al 9-1-1. Llevaba 13 meses muerto y solo quedaba la osamenta con segmentos de piel negros, y la mujer en parte justificó su silencio por razones religiosas y luego temor, dijo González.
"Ella al principio pensó que Dios le iba a dar la vida otra vez y pasado el tiempo no dijo nada por miedo... no dijo nada por temor a cómo se lo decía a la familia", expresó la sargento.
González precisó que Rodríguez fue entrevistada el sábado de forma preliminar pero será objeto de una segunda entrevista. Esta sería pautada cuando se reúnan para discutir el caso...
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