Reconozca el coraje antes del estallido

Por Iliana Fuentes Lugo

iliana.fuentes@elnuevodia.com

Quienes cometen actos violentos impulsados por un coraje descontrolado suelen seguir un mismo patrón, que no necesariamente responde a un padecimiento mental, según el psiquiatra forense Raúl López.

En estos casos se repiten los rasgos de una persona reservada, tímida, insegura, que se siente incomprendida y que "nunca ha logrado engranar con el sistema social", explicó López.

Al mismo tiempo, el psiquiatra forense señaló que no todas las personas tímidas tienen problemas con sus emociones o cometerán actos violentos.

Precisó que quienes suelen cometer estos actos comparten "la inhabilidad para manejar el coraje y para estar en contacto emotivo con otras personas".

Por eso, según López, cuando alguien con un perfil de persona pasiva comete actos violentos, "el comentario de los conocidos suele ser, 'no se metía con nadie', pero no se metía con nadie ni para bien, ni para mal". Es entonces cuando se hace notable que había dificultades para controlar las emociones y tener empatía con quienes le rodean.

El coraje es una emoción tan natural como la alegría y surge, en la mayoría de los casos, de la frustración por no lograr un objetivo determinado. Para poder manejarlo adecuadamente, es importante comenzar por reconocerlo y aceptarlo.

"Lo primero es que la persona se detenga a pensar a qué está reaccionando. Tener bien claro qué es lo que nos molesta es esencial para ver qué nos creó esa...

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